Por Enric González *
Desde Roma

Las llamadas Brigadas Abu Hafs Al Masri, vinculadas con Osama bin Laden y Al-Qaida, lanzaron ayer una “última advertencia al pueblo italiano” en un mensaje difundido por Internet: “Echen al incapaz Berlusconi o Italia arderá”. La amenaza de atentado, similar a la que unos días atrás exigía la retirada de las tropas italianas de Irak antes del 15 de agosto, fue considerada “seria” por el Ministerio del Interior.
El gobierno italiano teme atentados en las ciudades turísticas o en McDonald’s céntricos, basándose en sus propias informaciones y en informes facilitados por la CIA. En Roma, Venecia, Florencia, Pisa y Nápoles se han desplegado dispositivos policiales extraordinarios, y desde hace unos días el ministro del Interior, Giuseppe Pisanu, tiene sobre la mesa un plan para elevar el grado de alarma hasta el denominado “Bravo”, el segundo más alto. Por el momento, sin embargo, ha preferido no aprobar el plan, que agravaría la preocupación general y entorpecería la temporada turística sin mejorar, según distintos expertos, la capacidad de prevención de atentados. “Nos encontramos ya en Italia, ninguno de ustedes está seguro”, decía el mensaje, que concluía con tonos apocalípticos: “Esperen un baño de sangre similar al del 11 de septiembre. Escribiremos con nuestra sangre y con la de miles de italianos una nueva página de su historia”. El texto, redactado en árabe clásico, mostraba conocimiento de la actualidad política italiana, con referencias a los medios de Silvio Berlusconi y a noticias publicadas en la prensa local. La vigilancia en los aeropuertos se reforzó desde el jueves, y la psicosis de atentado inminente provocó ayer el cierre y la evacuación de la terminal C de Fiumicino (Roma) durante un cuarto hora, en lo que resultó una falsa alarma.

* De El País de Madrid. Especial para Página/12.