EL MUNDO
› ASI LO VEN
Calendario en la urgencia
Irak es uno de los temas centrales en la disputa por la Casa Blanca. El actual presidente de Estados Unidos insiste con que se celebrarán elecciones allí –después del 2 de noviembre, cita electoral en Norteamérica– en enero de 2005, como lo pauta el cronograma. En el medio, decapitaciones, coches bomba y levantamientos insurgentes que vienen a descontextualizar los planes para el país ocupado.
The New York Times
El gran ayatolá y líder chiíta iraquí, Alí al Sistani, está preocupado de que los chiítas no estén adecuadamente representados en el futuro gobierno, alimentando inquietudes de que una elección nacional estipulada para enero no ocurra. Sin embargo, no es una situación sin esperanzas, como parece. En primer lugar, una mirada más cercana a los mensajes del bando de Sistani revela que su intervención un esfuerzo calculado para mejorar las oportunidades de los chiítas de tener éxito. Y segundo, posponer las elecciones no sería el fin del mundo, de hecho podría ser exactamente lo que se necesita para asegurar que todos los grupos étnicos y religiosos del país vean la elección como legítima.
(Noah Feldman)
Harpers Magazine
Una batalla entre los pragmatistas y los creyentes verdaderos está siendo librada en la administración Bush. Los pragmatistas eran hombres como el secretario de Estado, Colin Powell, y el general Jay Garner, del primer convoy norteamericano en la posguerra de Irak. El plan del general Garner era bastante directo: arreglen la infraestructura, consigan rápidas y sucias elecciones, dejen la terapia de shock para el FMI y concéntrense en asegurar las bases militares norteamericanas al modelo de las Filipinas. Del otro lado, los necoconservadores vicepresidente Dick Cheney, secretario de Defensa Donald Rumsfeld, subsecretario de Defensa Paul Wolfowitz. Para los creyentes de la Casa Blanca, los planes del general Garner para la posguerra en Irak parecían poco ambiciosos. ¿Por qué simplemente una estación de carbón cuando se puede tener un modelo de mercado libre?
(Naomi Klein)
L.A. Times
El presidente Bush y el primer ministro interino de Irak, Iyad Allawi, describieron un lindo retrato de la nación en guerra, diciendo que las elecciones y la democracia estaban cerca. Sin embargo, sus visiones parecen contradecir la realidad. Las decapitaciones de extranjeros, los ataques diarios a tropas norteamericanas y los coches bomba que han matado a miles de iraquíes contradicen las descripciones optimistas. Hay que agregar los comentarios inquietantes de Sistani, amenazando con retirar su apoyo para llevar a cabo las elecciones a menos que se realicen cambios para incrementar la representación de los chiítas.
(Editorial)