EL MUNDO
› ASPERO CARA A CARA SOBRE IRAK Y ANTITERRORISMO EN IOWA
Los Estados Indecisos de América
Cuando restan menos de dos semanas para unas elecciones particularmente reñidas, George W. Bush-John Forbes Kerry se sacaron chispas sobre terrorismo, Irak y seguridad nacional en Iowa, uno de los Estados indecisos que serán claves para el resultado final.
Por Andrew Buncombe*
Desde Washington
Separados por menos de 100 kilómetros en el corazón de Estados Unidos, George Bush y John Kerry se atacaron vigorosamente ayer en Iowa, uno de los Estados cruciales que probablemente definan el resultado de la elección presidencial, ahora que falta menos de dos semanas. En Waterloo, Kerry dio un largo y detallado discurso sobre política internacional, delineando cómo trataría de diferente manera que Bush los temas de Irak y el terrorismo, enfatizando la necesidad de desplegar liderazgo internacional y formar coaliciones. En Mason City, a menos de una hora por automóvil hacia el noroeste por caminos prácticamente vacíos, Bush describía a su contrincante como confundido y errado.
Kerry dijo: “Estados Unidos está luchando y debe ganar dos guerras: la guerra en Irak y la guerra contra el terror. Al presidente Bush le gusta confundir a las dos. Dice que Irak es el epicentro de la guerra contra el terror. En realidad, Irak fue un profundo desvío de atención de esa guerra y la batalla contra el enemigo. Fue un profundo desvío de atención respecto de Osama bin Laden y Al Qaida”. Como en una respuesta directa, Bush, hablando poco después, declaró: “Mi opositor no comprende nuestra batalla contra los insurgentes y los terroristas en Irak, llamando a Irak un desvío de atención de la guerra contra el terror”. Si las encuestas a nivel nacional muestran que los dos candidatos están cabeza a cabeza, con Bush quizás en leve ventaja, las encuestas en Iowa muestran que la batalla por los siete votos electorales del Estado están aún más empatados. Cuatro encuestas recientes en este Estado de ondulantes tierras de granjas y pequeñas ciudades, que en 2000 Al Gore ganó por sólo 4144 votos de los 1,3 millón emitidos, sugiere que los hombres están esencialmente empatados.
Como prueba de lo importante que ambos lados creen que será Iowa el 2 de noviembre, la visita de Bush ayer fue la número 20 al Estado durante su presidencia y la cuarta en los últimos quince días. El discurso de Kerry en Waterloo fue su tercera visita a Iowa en el mismo período de quince días. Sus compañeros de fórmula, Dick Cheney y John Edwards, también visitaron varias veces Iowa, política y geográficamente en el medio de Estados Unidos. Kerry dio su discurso sobre política exterior en el Centro de Convenciones Five Sullivan Brothers, nombrado en honor de cinco hermanos de esta pequeña ciudad que murieron juntos el 13 de noviembre de 1942, cuando su barco, el “USS Juneau”, fue hundido en Guadalcanal en el Pacífico.
“Es un honor estar aquí”, dijo Kerry. “Todos sabemos sobre esos cinco hermanos que murieron en el mismo barco durante la Segunda Guerra Mundial y lo que ese tipo de sacrificio significa para las familias estadounidenses y para nuestra nación. Como los incontables otros que han dado su vida en el servicio, están el la grandeza de Estados Unidos.” Repitiendo el lenguaje muscular que uso en la Convención Nacional Demócrata, Kerry anunció una serie de medidas que dijo que tomaría como presidente para tratar con el terrorismo: una reforma de inteligencia, una expansión de 40.000 tropas en el Ejército y una inversión en las fuerzas especiales de Estados Unidos para permitirles lidiar mejor con los terroristas.
“No se equivoquen, nuestras tropas son las mejores entrenadas y las fuerzas mejores dirigidas en el mundo y han estado haciendo su tarea honorable y valientemente”, dijo. “El problema es que el comandante en jefe no ha estado haciendo la suya. Si el presidente Bush no puede reconocer los problemas en Irak, no los podrá solucionar. Yo sí los reconozco y los solucionaré.” Añadió: “Este presidente dice que es un líder. Bueno, señor presidente, mire detrás suyo. No hay casi nadie ahí. No es un liderazgo si no hemos formado la alianza más fuerte posible y si Estados Unidos está casi solo”. El discurso de política exterior del senador de Massachusetts seguramente fue diseñado para replicar los recientes ataques a él de Bush y más exactamente de Cheney, que aportó el fantasma de Estados Unidos siendo atacada por armas nucleares; declaró que Kerry no podía tratar con tal escenario.
Ayer no disminuyó la atención en el campo de Bush. En Mason City, Bush acusó nuevamente a Kerry de no comprender la importancia de la guerra en Irak. “El próximo comandante en jefe debe conducirnos a la victoria en esta guerra y no se puede ganar una guerra cuando no se cree que se está librando una”, dijo. Para Kerry, por supuesto, Iowa trae buenos recuerdos. En los helados días de enero pasado, ganó la competencia primaria demócrata del estado, logrando un impulso que le permitió seguir y asegurarse la nominación del partido como presidente. Pero los demócratas son conscientes de lo pareja que está la competencia este año. Desde 2000, el número de partidarios empadronados ha aumentado en más de 40.000; los republicanos han sumado menos de 7000.
Sin embargo, un paseo alrededor de Waterloo ayer a la mañana sugería, anecdóticamente por lo menos, que a nivel local había suficientes partidarios de ambos campos. Jim Baumeister, de 68 años, un veterano militar y contador retirado, llevaba un palo con sandalias de playa adheridas, como referencia al supuesto hábito de veleta de Kerry. “No puedo soportar a Kerry por lo que hizo cuando volvió de Vietnam”, dijo. “Yo serví en el ejército durante cuatro años; simplemente no se puede denunciar la guerra”, dijo.
Por el contrario, Jeanne Lueders, de 49 años, no podría haber ofrecido más apoyo para Kerry, a quien votó durante las elecciones primarias demócratas. Dijo: “Yo me decidí hace tiempo. Estoy preocupada por el alto costo de los medicamentos. Tengo que tomar medicinas para mantenerme viva; mi madre, que tiene 80, tiene que tomar medicinas”. Añadió: “Lo voté en enero. Me gusta su calma. Es muy directo. No me pareció un mercachifle”.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère