Las negociaciones para la adhesión de Turquía a la Unión Europea (UE) se iniciarán el 3 de octubre de 2005, confirmó ayer el primer ministro holandés, Jan Peter Balkenende, en conferencia de prensa. Balkenende, cuyo país ejerce la presidencia semestral de la UE, aseguró que los líderes europeos decidieron que se pueden “iniciar negociaciones con Turquía basándose en los análisis de la Comisión”.
El alto representante para la política exterior de la Unión Europea, Javier Solana, exhortó a Turquía a reconocer a la República de Chipre, porque en caso contrario, advirtió, será “difícil” que Ankara se integre en la UE. Los jefes de Estado y de gobierno de la Unión tenían previsto dar el visto bueno a la adhesión de Bulgaria y Rumania. Bulgaria era el que ayer tenía la vía más expedita, mientras que sobre Rumania siguen pesando las dudas que plantea la corrupción que padece el país. “Confío en que el Consejo fije la fecha para la firma del tratado de adhesión de Bulgaria y Rumania hacia la mitad de 2005”, manifestó ayer el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso. En los casos de Bulgaria y Turquía, faltan finalizar algunos detalles, esencialmente cuestiones de justicia e interior para los búlgaros, mientras que los rumanos tienen que realizar avances en diversos frentes, entre los que se incluye la lucha contra la corrupción, que llega a altas esferas del Estado.