EL MUNDO
› EL PREMIER CONSERVADOR, SHARON, SE LO CONCEDIO AL LIDER LABORISTA, PERETZ
Habrá elecciones anticipadas en Israel
Por Juan Miguel Muñoz *
Desde Jerusalén
No era su deseo, pero constatada la imposibilidad de agotar la legislatura, el primer ministro israelí, Ariel Sharon, accedió ayer a la exigencia del nuevo líder del Partido Laborista, Amir Peretz, y anunció la convocatoria anticipada de las elecciones generales, que se celebrarán a finales de febrero o en marzo, ocho meses antes del calendario previsto. Ambos dirigentes se reunieron brevemente en Tel Aviv para decidir el adelanto electoral, un acontecimiento político muy frecuente en la historia de Israel. El lunes, en el Parlamento, se decidirá la fecha de los comicios.
“No creía que las elecciones debieran anticiparse, pero una vez que me ha quedado claro que la estructura política vigente se estaba quebrando, he llegado a la conclusión de que lo mejor para el país es que la campaña electoral comience lo antes posible”, declaró Sharon en una entrevista ofrecida al diario Maariv. “Debemos asegurarnos de que 2006 no será un año perdido en lo que se refiere al logro de un acuerdo con los palestinos”, comentó Sharon al citado periódico. Un propósito que los dirigentes palestinos también persiguen, pero que no conciben mientras el mandatario hebreo continúe con su política de expansión de las colonias en el territorio ocupado de Cisjordania; con la construcción del muro de hormigón y las vallas metálicas ilegales que dividen a poblaciones palestinas y las separan de Israel, y con los asesinatos de militantes: ayer murieron a tiros en Yenín dos activistas de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, el brazo armado del partido del presidente Mahmud Abbas, Al Fatah.
No es este conflicto el único factor que ha influido en la premura que ahora muestra Sharon. La inestabilidad política se deja notar estos días en los mercados financieros y en la cotización del shekel respecto del dólar. Los votantes decidirán también entre las políticas económicas liberales aplicadas por el actual gobierno o un giro radical a la izquierda, como ha prometido el sindicalista Peretz. El lunes se conocerá la fecha exacta, después de que Sharon consulte con los portavoces de todos los grupos de la Cámara, que cuenta con 120 escaños y 15 grupos parlamentarios, aunque a los comicios de enero de 2003 concurrieron 27 partidos, algunos tan peculiares como el denominado Los Derechos de los Hombres en la Familia. La fragmentación de la Kneset –que concluye su 16ª legislatura desde la fundación del Estado de Israel, en mayo de 1948– es un fenómeno imparable. Puede que alguno más se sume a las próximas legislativas.
El arranque de 2006 promete ser emocionante. El Partido Laborista, que cuenta en el presente Parlamento con 21 diputados, pretende sacudir el panorama político y acercarse a los 40 escaños propiedad del Likud. Las trifulcas internas en este partido nacionalista y conservador parecen estar pasando factura, a tenor de una reciente encuesta que le otorgaba 33 asientos. Por el contrario, el mismo sondeo elevaba hasta 27 los escaños con que se harían los laboristas con su nuevo líder.
* De El País de Madrid. Especial para Página/12.