Por Mercedes López San Miguel
Desde Santiago

Fue un cierre de campaña sobrio e intimista el de Michelle Bachelet. El serio accidente vial que sufrieron varios jóvenes militantes socialistas cuando venían a Santiago el martes atravesó la sala del ex Congreso Morandé, donde se realizaba el acto ayer jueves, que también fue feriado pero muy caluroso. Entre las aproximadamente 200 personas del auditorio se destacaban figuras de la cultura y la política. Afuera del recinto esperaban los seguidores de la candidata de la Concertación al grito de “Se siente, se siente, Bachelet presidente”. Adentro, la escena era de un fervor contenido por razones de luto y respeto.
La candidata socialista y mejor posicionada para quedarse en La Moneda pidió recordar a las cinco víctimas del accidente. El acto final, que estaba pautado para el miércoles, fue suspendido ante el dolor de los familiares. Ayer, Bachelet se definió como “una mujer como tantas otras, nadie me ha regalado nada como profesional”. Sus hijos la escuchaban a dos butacas de distancia. La platea aplaudió fuertemente al escucharla decir que “este domingo la Concertación demostrará que es mayoría”. Atentos miraban el escritor Antonio Skármeta, la diputada Isabel Allende y su prima escritora de igual nombre.
Bachellet es madre, esposa, médica y probablemente sea la próxima presidente de Chile. Fue ministra de Salud y Defensa del gobierno de la Concertación de Ricardo Lagos. Según un sondeo dado a conocer por ayer por el diario La Nación, Lagos termina su gestión con el 71 por ciento que lo apoya. Ese mismo periódico dio cuenta de una encuesta de Cerc que da 41 puntos a la candidata de la Concertación para el 11 y entre 50 y 56 en una segunda vuelta en enero. Para el segundo puesto, si bien Sebastián Piñera tiene mayores posibilidades, la cifra de indecisos mantiene la incertidumbre a tres días de los comicios. Piñera tiene el 20 por ciento, Joaquín Lavín, su rival, también de derecha, tiene 19. En la pugna entre los dos candidatos se dirime la dirección de la derecha, antes dominada por ex pinochetistas.
Soledad Alvear, que estuvo entre las presidenciables de la Concertación y, al igual que Bachellet, fue ministra de Lagos, explicó a Página/12 que “se salió a la calle, trabajamos muy bien. He estado en la calle y veo el comportamiento de los electores y su respaldo a Michelle Bachelet”. Además señaló que la oposición intenta hacerse de la bandera de la lucha contra la pobreza, tradicional del socialismo, y advirtió que “por sus hechos los conocen”.
El magnate Sebastián Piñera lidera la formación de tinte liberal Renovación Nacional (RN), mientras que Joaquín Lavín es el candidato que eligen los ex pinochetistas por la Unión Democrática e Independiente (UDI). Paralelamente, el candidato de la izquierda –Partido Humanista–, Tomás Hirsch, salió de caravana por la ciudad, priorizando las comunas populares y evitando en zigzag los barrios acomodados, donde el voto es conservador, como Las Condes y Providencia. En el acto de Piñera pasaron la canción El rey, que le gusta al detenido ex dictador Augusto Pinochet. Lavín se dio cita ayer en Concepción y estará de vuelta en Santiago para el día electoral. Los cuatro partidos cuestionaron la última encuesta, dada la cercanía con los comicios. La madrugada de hoy iba a poner fin al plazo de los actos proselitistas.