El subsecretario del Interior, Felipe Harboe, informó ayer a la mañana que 819 personas fueron detenidas en el país a raíz de los desmanes ocurridos el jueves con motivo del Día del Joven Combatiente. Según el reporte del subsecretario del Interior, 38 carabineros resultaron lesionados, dos de ellos de gravedad, el primero al ser baleado en su pierna izquierda cuando intentaba evitar el saqueo de un supermercado en la comuna de La Granja y el segundo al recibir una pedrada en la sien cuando conducía una radiopatrulla.

Harboe aseguró que Carabineros no fue sobrepasado por los manifestantes que provocaron serios disturbios ayer en la capital, sino que sus efectivos debieron dispersarse para actuar en los diversos focos de desmanes. “El control del orden, cuando son jóvenes, es muy complejo. Sin perjuicio de ello, la violencia inusitada que se vivió no puede ser aceptada. Carabineros respondió con fuerza disuasiva, pero cuando se han producido por otro lado algunas reacciones de parte de Carabineros frente a manifestantes, hay algunas personas que tienden a cuestionar ese accionar”, agregó el subsecretario del Interior. La mayoría de los detenidos son menores de edad, dijo la intendenta de Santiago, Adriana Delpiano. “El 80 o el 90 por ciento de los detenidos son menores de 18 años, y de ésos la gran mayoría son menores de 16 años”, dijo Delpiano.

“Lo más nuevo de la jornada de ayer fue claramente la cantidad de niños y jóvenes” que participaron en las manifestaciones, agregó la intendenta. La protesta, convocada por grupos de izquierda, opacó el Día del Joven Combatiente que recuerda el asesinato el 29 de marzo de 1985 de dos hermanos, Rafael y Eduardo Toledo, jóvenes del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), hecho por el cual el jueves fueron acusados de homicidio calificado cuatro agentes de carabineros que permanecen en libertad provisional.