PALESTINA.

Otro ataque de Israel

Dos nuevos ataques israelíes contra la Franja de Gaza dejaron seis palestinos muertos. Tres eran milicianos y fallecieron durante el primer bombardeo contra un auto en Jan Yunes, en el sur de la Franja. Las víctimas serían, según el ejército israelí, miembros del grupo radical Yihad Islámica. Los otros tres eran civiles y murieron cuando los israelíes atacaron anoche un taller metalúrgico en el centro del territorio palestino. Horas antes, el ala militar de Hamas, el partido en el poder en Gaza, había advertido que rechazarán cualquier fuerza internacional que se intente despleglar en la Franja. “Estamos en contra de internacionalizar la causa palestina”, aseguró el primer ministro –destituido por el presidente palestino Mahmud Abbas– Ismail Haniye, quien además advirtió que responderán con misiles y cohetes de ser necesario.

IRAK.

56 muertos en un día

Al menos 56 personas murieron ayer en Irak. En el barrio chiíta de Sadr City, en la capital del país, 26 presuntos insurgentes fallecieron en dos redadas del ejército estadounidense. Según el mando militar, muchos de ellos tendrían vínculos con Irán. Mientras tanto en el centro del país, al menos 20 personas murieron cuando un atacante suicida, vestido de policía, se inmoló frente a una oficina de reclutamiento de la policía, dejando además 22 heridos. En medio de la violencia, los iraquíes se anotaron una pequeña victoria. El ejército estadounidense acusó formalmente a dos soldados por asesinato premeditado. Se los acusó de plantarles armas a tres iraquíes, a quienes habían matado a tiros en el medio de la calle.

AFGANISTAN.

La OTAN mató civiles

Otra vez un ataque de la OTAN en Afganistán termina con civiles muertos. Las cifras varían. Algunas autoridades locales del sur del país aseguran que serían 65 afganos. Otras fuentes sostienen que el número de víctimas podría ser el doble. Lo cierto es que las fuerzas, comandadas por Estados Unidos, volvieron a bombardear una zona con población civil. Según las autoridades locales, acusadas de complicidad con Washington, los militares extranjeros reaccionaron a un ataque de un grupo de rebeldes. El comando estadounidense reconoció que hubo bajas civiles, pero anoche seguía sosteniendo que eran menos de lo publicado. En la otra punta del país, otra ofensiva de la OTAN terminaba con 35 talibanes muertos.

VENEZUELA.

Chávez en el “eje del mal”

Hugo Chávez se despidió de Rusia y partió hacia Irán. Después de dos días de negociaciones, visitas y acuerdos militares en Moscú, el presidente venezolano se preparaba anoche para afianzar otra alianza que considera esencial. Chávez es uno de los principales defensores de su par iraní, Mahmud Ahmadinejad, y de sus políticas. Este apoyo, sumado a su acérrima posición antiestadounidense, ha hecho del presidente venezolano una de las figuras internacionales más populares en Teherán. El año pasado Chávez recibió la Alta Medalla de la República Islámica de Irán por contribuir a mejorar las relaciones bilaterales en los últimos años. Además de intercambiar halagos, los dos mandatarios analizarán hoy los avances de los acuerdos firmados en 2006. Chávez también tiene previsto reunirse con el líder supremo de la revolución iraní, el ayatolá Alí Khamenei.

COLOMBIA.

El Papa y las FARC

El conflicto colombiano sigue sumando voces de la comunidad internacional. Esta vez fue el Vaticano el que ayer ofreció sus condolencias a las familias de los once ex diputados provinciales que murieron hace dos semanas en un campamento de las FARC. “Su Santidad Benedicto XVI, compartiendo el dolor de sus familias, ofrece sufragios al Altísimo por el eterno descanso de los fallecidos víctimas de tan injustificable violencia”, señala el texto firmado por el secretario de Estado de la Santa Sede, cardenal Tarcisio Bertone. “Expresa su más enérgica reprobación por estas acciones contra la vida y la dignidad de las personas, el Papa pide al Señor que conceda al amado pueblo colombiano serenidad y entereza”, añade. El asesinato de los once diputados colombianos, en cautiverio desde hacía cinco años, conmocionó al mundo y agregó tensión a la relación entre el gobierno colombiano y la guerrilla.