Autoridades y empresas aéreas pusieron en marcha ayer un servicio aéreo–terrestre para que completen su viaje entre 800 y mil chilenos que permanecían en la Argentina, especialmente en Ezeiza, desde que el sábado fueron desviados a aeropuertos de la Argentina. Un comunicado oficial reportó que el canciller Jorge Taiana “coordinó la asistencia” de los turistas chilenos con los gobernadores de Mendoza y San Juan, Celso Jaque y José Luis Gioja, respectivamente, y la empresa Aerolíneas Argentinas. “Salieron dos aviones desde Buenos Aires esta mañana (por ayer) y está previsto que haya más vuelos”, anunció el cónsul general de Chile en la Argentina, Hernán Brante. Los viajeros fueron llevados por vía aérea a Mendoza, donde se agregaron al contingente de pasajeros de dos vuelos internos chilenos que llegaron de este lado de la cordillera tras el cierre del aeropuerto de Santiago de Chile. Luego embarcaron en autobuses que cruzaron la cordillera, en un viaje de entre 8 y 10 horas. El plan prevé que en la capital chilena aborden los buses pasajeros que debían venir a la Argentina para hacer el mismo trayecto de regreso. Los pasajeros varados en la capital argentina provenían de Madrid, París, Bogotá y Panamá.