El ministro de Exteriores de Libia, Musa Kusa, anunció ayer en Londres que renuncia a seguir formando parte del gobierno del coronel Muammar Khadafi. Así lo informó el Foreign Office, que aseguró que Kusa llegó en un avión procedente de Túnez a territorio británico, Un portavoz del Foreign Office afirmó que el ex canciller no quería seguir representando a su país internacionalmente. La confirmación oficial de la renuncia de Kusa se produjo después de intensos rumores de sus intenciones de desertar y también ponen fin a las afirmación del régimen de Khadafi de que el jefe de la diplomacia libia se encontraba en el Reino Unido para llevar a cabo una misión oficial diplomática por encargo del coronel Khadafi. Kusa era una de las principales figuras del gobierno de Khadafi. El ex ministro, acompañado de Abdelati Laabidi, viceministro de Asuntos Europeos, entró el lunes en Túnez por carretera, a través del puesto fronterizo de Ras Jadir.

A partir de ahí se perdió su rastro hasta que aterrizó ayer en el aeropuerto de Farnborough, que no recibe aviones comerciales, lo que implica que el ministro libio viajó en un vuelo especial. Inicialmente se creyó que el ministro estaba en Túnez, pero la agencia oficial tunecina anunció que pasó dos días en un hotel de Djerba y que partió a Londres, sin especificar el motivo de su visita. Se asegura que el político libio no se entrevistó aún con miembros del gobierno del primer ministro, David Cameron, pero se sabe que el canciller británico, William Hague, contactó a Kusa en las últimas semanas. Kusa, que como diplomático trabajó varios años en Londres, es considerada una de las personas más cercanas a Khadafi en las últimas décadas y una figura decisiva hace diez años para convencer al coronel de que renunciara al terrorismo y a desarrollar armas de destrucción masiva para tener una buena relación con Occidente.