Por primera vez, el director de orquesta argentino-israelí Daniel Barenboim dirigió un concierto en la Franja de Gaza. Al frente de la Orquesta de Gaza (un conglomerado de músicos de todo el mundo), y ante la presencia de cientos de palestinos, el maestro ofreció el concierto en colaboración con varias ONG palestinas y las Naciones Unidas. Barenboim se dirigió al público diciendo que “estuvieron bloqueados durante muchos años. Por eso estamos todos aquí hoy (por ayer). Se trata de un gesto único de parte de toda Europa para ustedes, en Gaza”.

El pianista y director de orquesta, de 68 años, recibió la nacionalidad honoraria palestina en reconocimiento por su solidaridad respecto del reclamo de la creación de un Estado árabe en ese territorio. “Soy palestino y también israelí”, afirmó en medio de una ovación. “Como pueden ver, es posible ser ambas cosas.”

Nacido en Buenos Aires en 1942 de padres judíos de origen ruso, Daniel Barenboim utiliza su prestigio internacional para promover la causa de la paz entre Israel y los palestinos. En 1999 creó junto a su amigo Edward Said, intelectual palestino fallecido en 2003, una célebre orquesta de jóvenes árabes e israelíes de 14 a 25 años, llamada la Orquesta del Diván Este-Oeste, la cual ha girado por el mundo entero.

La viuda de Edward Said calificó el evento de ayer de “fenomenal”. “Mi marido hubiera estado encantado. Espero que la gente aprecie y entienda la importancia de esta visita”, dijo. El flautista de la Filarmónica de Viena, Dieter Flury, afirmó haber interpretado esas obras cientos de veces, pero “tocarlas aquí fue totalmente distinto”.

Barenboim visita regularmente Cisjordania, pero en varias ocasiones las autoridades israelíes le rechazaron el permiso para ir a Gaza pasando por territorio israelí.

En 2009, y con motivo de la conmemoración de los 20 años de la caída del Muro de Berlín, Barenboim calificó de “grave error” el muro de separación construido por Israel en Cisjordania durante 2003. La Corte Internacional de Justicia calificó de ilegal esa valla y ordenó su desmantelamiento en un veredicto pronunciado el 9 de julio de 2004. Sin embargo, hasta el día de hoy, Israel optó por desobedecer esa orden.

El concierto tuvo lugar en el centro cultural Al Mathaf, en la ciudad de Gaza, y se interpretaron obras de Mozart, tales como la Pequeña Serenata Nocturna y la Sinfonía 40 en Sol menor.