El caso Bárcenas le estalló a Rajoy en su peor momento. Una investigación del Centro de Investigaciones Sociológicas de España, realizada en enero, en las vísperas del escándalo, y difundida ayer por el diario El País, señala que el gobierno ya transitaba por un período de desgaste. Si las elecciones en la península fueran hoy, el PP obtendría, según este estudio, un 35 por ciento de los votos, retrocediendo nueve puntos en comparación con los sufragios cosechados en las elecciones generales del 20 de noviembre de 2011. Esta caída en su imagen pública hace retroceder en más de una tercera parte la ventaja con la que el PP comenzó su legislatura sobre el Partido Socialista Español, que hoy contaría con el 30 por ciento de la intención de voto. La brecha entre ambas fuerzas, que en octubre de 2012 era de 15,9 puntos, ahora se redujo a 4,8 puntos. Además de la caída de imagen de los dos partidos, la encuesta muestra desconfianza por el bipartidismo. Según las 2483 entrevistas realizadas en cientos de municipios de todo el país, los votos perdidos por PP y PSOE van a parar al abstencionismo y, especialmente, a Izquierda Unida y Unión Progreso y Democracia (UPyD).