El Consejo para la Economía del Vaticano mantuvo ayer una reunión en Ciudad del Vaticano para analizar, entre otros asuntos, los estatutos de la Secretaría, cuya misión será gestionar y reformar las actividades económicas y administrativas de la Santa Sede. “En la reunión se han analizado los estatutos de la Secretaría para la Economía y la figura del auditor general y la integración de los servicios de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica en el funcionamiento de la Secretaría de Economía”, afirmó la Santa Sede en su portal web oficial. El Consejo para la Economía es el órgano que tutela el “ministerio” de Economía de la Santa Sede y fue creado por el papa Francisco en febrero pasado. Está formado por quince miembros, ocho cardenales y siete laicos, y se ocupa de preparar las directivas que tiene que seguir la Secretaría de Economía. La Secretaría de Economía fue presentada como una instancia destinada a dar credibilidad y transparencia a las cuentas y a las posesiones del Vaticano y también, como explicó en su momento el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, para invertir “mejor las finanzas vaticanas entre los pobres y marginados”.