Moscú consideró ayer que la Unión Europea (UE), con la extensión de las sanciones a empresas y políticos rusos, lo único que logra es empeorar las relaciones con Ucrania. “Las decisiones adoptadas por el Consejo de Ministros de Exteriores causan decepción”, expresó en su página web la Cancillería rusa en referencia al acuerdo alcanzado por los Veintiocho para ampliar hasta septiembre próximo las sanciones. Ucrania y los miembros de la Unión Europea acusan a Rusia de apoyar a los rebeldes con armas, y es por ello que impusieron sanciones contra empresas y políticos rusos que han socavado su economía. Moscú negó cualquier colaboración con los separatistas y sostuvo que si hubiera militares rusos luchando en Ucrania ya habrían sido mostrados por las cámaras de televisión. “Es lamentable que el Consejo haya sido nuevamente rehén de una minoría agresiva, para la cual la crisis ucraniana es sólo un pretexto para imponer enfoques ‘rusófobos’ e impedir la cooperación normal entre Rusia y la Unión Europea”, afirmó la Cancillería del gobierno que preside Vladimir Putin.