Uno de los precandidatos presidenciales del partido que gobernó México ininterrumpidamente por casi 70 años, Arturo Montiel, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), está siendo investigado por presuntos movimientos financieros irregulares, según anunció ayer el Canal 4, de la empresa Televisa. Difundió documentos de la Procuraduría General y de la Secretaría de Hacienda en los que se detallan ingresos en líquido en las cuentas bancarias de la familia del ex gobernador del estado de México, especialmente de su hijo, y la compra de mansiones en Acapulco y la zona turística de Valle de Branco, a nombre suyo y de su esposa. Montiel reaccionó indignado y aseguró que se trata de un “golpe bajo” para evitar que el PRI vuelva al gobierno. Por su lado, el procurador general mexicano se limitó a afirmar que por el momento “no hay ninguna querella”. La acusación llega cuando Montiel se prepara para una interna muy difícil con el ex líder priísta, Roberto Madrazo. El secretario de Gobernación, Carlos Abascal, se limitó a declarar: “Ni lo afirmo ni lo niego, simplemente me reservo a darlo a conocer en el caso de que sea jurídicamente pertinente”. Sin embargo, el presidente del PRI sí responsabilizó al gobierno federal y le exigió que “no participe en las actividades que sólo a los partidos y a los candidatos corresponde, que no filtre información ominosa en contra de ningún candidato de ningún partido político”.