EL MUNDO • SUBNOTA › EL TRISTE SALDO DEL CAOS EN EL SUR MEXICANO
› Por G. A. A.
La crisis en Oaxaca empieza a tomar un cariz de guerra civil. Los roces han sido constantes desde la agresión de priístas contra la APPO el viernes de la semana pasada, que costó la vida a cuatro personas y que sirvió de pretexto para que el gobierno de Vicente Fox enviara fuerzas federales y militares a recuperar la ciudad, aunque en el operativo murieron otras dos personas. Los detenidos suman ya más de un centenar, se reporta al menos cincuenta personas “desaparecidas” y la Policía Federal Preventiva realiza cateos en varias colonias de la ciudad, donde un grupo de operaciones especiales ha entrado por la fuerza a varios domicilios en busca de varios dirigentes del movimiento social. Desde el miércoles por la noche, la ciudad vive un virtual toque de queda y personas y vehículos son detenidos para revisión por parecer “sospechosos”.
Pese a la incursión policíaca, el PRI oaxaqueño ha amenazado con lanzar a las calles a 20 mil de sus militantes para enfrentar a los maestros de la Sección 22 y a los asambleístas. Advirtió a las autoridades que si la PFP no detiene a los líderes de la APPO, lo harán ellos mismos: “Somos más que ellos y estamos dispuestos a todo para restablecer el orden y la paz pública de la manera que sea”.
Entre las víctimas hay dos personas ajenas al conflicto. Uno es el camarógrafo y activista estadounidense Bradley Hill, que murió al recibir dos balazos disparados por Santiago Zárate, regidor priísta de una comunidad oaxaqueña, y su jefe de escoltas Orlando Aguilar, quienes ya fueron detenidos. El otro muerto es un enfermero de la Cruz Roja que fue atravesado en el pecho por una granada de gases lacrimógenos.
La Iglesia católica propuso una tregua a la APPO y ofreció a la Secretaría de Gobernación un anexo de la Catedral para instalar una mesa de diálogo tendiente a lograr la reconciliación y la paz en Oaxaca, aunque advirtió que a este encuentro deben convocar personas ajenas al conflicto y con suficiente autoridad moral.
Mientras esto ocurría, la PFP recuperó las instalaciones del Canal 9 de la televisora del gobierno estatal, que se encontraba resguardada por mujeres desde el 1º de agosto pasado. En lo que llaman “segunda fase” del operativo de recuperación del Centro Histórico de la capital oaxaqueña, limpiaron calles, retiraron las barricadas que cerraban el paso de vehículos en el primer cuadro y realizaron patrullajes por diversas zonas de la ciudad. En este operativo fueron apoyados por la Policía Militar, a la que se trató de camuflar cambiándole el uniforme.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux