“Seguramente iré a votar, o no, vamos a ver las ganas que tenga. Cuando se habla del gobierno es muy genérica la pregunta, yo la verdad es que no tengo decisión por ninguno de los candidatos.” Con estas palabras, Eduardo Duhalde intentó ayer mostrarse prescindente en medio de la interna de su partido, que se complica cada vez más. “Yo soy el Presidente y creo que no sirve para nada entrar en debate con los candidatos”, agregó.
Duhalde formuló estas declaraciones ayer, en el marco de su programa radial “Conversando con el Presidente”. Cuando le preguntaron por los diferentes precandidatos del PJ, el ex gobernador dijo que “no es novedad para nadie” que en un primer momento “estaba entusiasmado con la idea de que fuera (el gobernador de Santa Fe, Carlos) Reutemann, pero él ha tomado una decisión personal que debemos respetar todos”.
De todas maneras, el Presidente dijo que “aunque tuviera decidido” apoyar a algún candidato en particular “tendría que guardarlo in pectore, porque no sirve para nada entrar en debate con los candidatos”.
La situación de Duhalde es complicada. Una vez que Reutemann decidió apartarse de la pelea, el Presidente buscó en José Manuel de la Sota un candidato sustituto. Pero las dificultades del cordobés para crecer en intención de voto fueron desinflando el entusiasmo inicial del Gobierno por su figura. Al mismo tiempo comenzó a registrarse un ascenso veloz de Adolfo Rodríguez Saá, que aún no decidió si competirá por dentro o por fuera del PJ.
El nuevo escenario obligó a un cambio de estrategia por parte de Duhalde, que, mientras intenta un acercamiento con el ex gobernador puntano, concentra su energía en su principal preocupación: frenar a Carlos Menem.
En otro tramo del programa, el Presidente aprovechó para cuestionar la propuesta de renovación masiva lanzada por Elisa Carrió, Luis Zamora y Víctor de Gennaro y ratificó su intención de abandonar la política luego del próximo recambio presidencial. “Uno de los problemas que tenemos es que no hay credibilidad, los presidentes dicen una cosa y después hacen otra. He renunciado a todo, incluso a la posibilidad de volver en el futuro, pero quiero que quede claro que esa renuncia la hago porque tengo un amor inmenso por la patria y quiero que esta transición sirva para que el que venga tenga el camino despejado”, señaló.
Duhalde también se refirió a las lentas negociaciones con el FMI. “Estamos cerca de acordar, aunque algunos sectores de la burocracia demandan más ajustes. Por eso quizá tenga algunas dificultades todavía, no con países que integran el Fondo, sino con algunos sectores medios del Fondo Monetario, de su burocracia, que creen que nuestros países pueden seguir ajustando”, aseguró.
Y a continuación describió las dificultades en la negociación. “Tenemos que ser primero equilibrados, porque las gestiones no pueden llevarnos a matar la posibilidad de que el mercado interno se recupere. Lo importante es que la comunidad internacional entienda que la única posibilidad de Argentina es mejorar el sistema productivo. Deben dejarnos crecer, deben ayudarnos a crecer. No estamos pidiendo, como se ha pedido otras veces, plata para que vaya a engrosar el sistema financiero o las cuentas en el exterior. Estamos pidiendo muy poco”, concluyó Duhalde.