La postergación del acuerdo entre el Gobierno y el campo impacienta a los inversores que ante la duda venden sus tenencias y compran dólares. Con la incertidumbre política a la cabeza, las acciones y los bonos tuvieron una jornada negativa. El Merval cayó 1,5 y los bonos registraron pérdidas de hasta el 5 por ciento. En este escenario, el dólar subió un centavo y terminó en 3,21. Por su parte el Banco Central miró desde un costado lo que sucedía en el mercado cambiario reduciendo su participación a la mínima expresión.

En la city entienden que la estrategia del BC es vender dólares en el mercado de futuros a precios atractivos y ocasionalmente en los segmentos de contado, en un momento en el que los exportadores están liquidando muy pocas divisas y no se produce otro ingreso significativo de dólares en la plaza. Ayer, el Central tuvo una intervención marginal en las operaciones del día y se concentró en el mercado de futuros donde la autoridad monetaria desembolsó cerca de 100 millones de dólares. Los negocios para los meses venideros reflejaron un alza del 0,6 por ciento en la cotización del dólar. Por su parte, el mercado mayorista funcionó como guía para el leve aumento de la moneda norteamericana. Los operadores de este segmento, que cerró en 3,184, sostienen que la especulación generada por la prolongación del conflicto entre el campo y el Gobierno lleva a los inversores y las empresas a posicionarse en divisas mientras se esperan los resultados de las negociaciones.

Más allá de las interpretaciones de los operadores, en el organismo que dirige Martín Redrado confían en la efectividad del mensaje que enviaron el día siguiente a la salida de Martín Lousteau de la cartera de Economía. Ese viernes el Banco Central vendió, según las versiones, entre 160 y 300 millones de dólares para contener el tipo de cambio frente a lo que para algunos fue una minicorrida. “Quedó demostrado que el Central tiene un poder de fuego y lo usa cuando es necesario”, habían afirmado desde la entidad. El objetivo de la autoridad monetaria es mantener el tipo de cambio estable y sin variaciones bruscas, lo que no significa que no vayan a verificarse leves alteraciones en la cotización del dólar tanto mayorista como minorista. El nivel de reservas que posee el Banco Central, que hoy sumaron dos millones de dólares y alcanzaron los 50.225 millones, y las demostraciones de poder financiero funcionan como un importante disuasivo a maniobras de operadores, potenciadas por la situación política.

Un dato que enciende una señal de alarma en el mercado de bonos es que, más allá de los bajos precios a los que se encuentran, los papeles no están siendo demandados. Aunque existe cierta confianza que en el mediano plazo recuperarán algo de lo que perdieron, en el microcentro sostienen que la falta de un índice de precios confiable y la calificación de investment grade obtenida por Brasil alejan a los inversores. Así, los Discount experimentaron una nueva caída del 3,6, el Bogar 2018 cedió 2,4 por ciento, el Par en pesos 1,5 y el cupón atado al PIB perdió 5,1 por ciento.