La represión policial a los que cortan las rutas no es una medida popular para resolver un conflicto que no parece haber afectado demasiado la imagen del Gobierno y la intención de voto. Esto aparece claramente en una encuesta realizada esta semana por OPSM, la consultora que dirige Enrique Zuleta Puceiro. El estudio fue dirigido técnicamente por Matías Zaldúa y Gustavo Di Lorenzo, y abarcó 1100 entrevistas a nivel nacional.

El 56 por ciento de los consultados se mostró en desacuerdo con las detenciones, medida que sólo entusiasmó al 8,9. Una abrumadora mayoría del 74 por ciento también se opuso a que la Justicia procesara a los productores arrestados en el lockout. Para una mayoría de dos tercios, la Justicia tiene un rol positivo que cumplir, pero decidiendo sobre la constitucionalidad de los impuestos y protegiendo la libre circulación en las rutas.

Aun así estos desacuerdos no parecen afectar la imagen de la Presidenta, que sigue recibiendo un 42 por ciento de intención de voto. Una amplia mayoría de dos tercios piensa que el Gobierno no tiene que ceder pero tampoco seguir inflexible, y que la solución está en un acuerdo intermedio. No extraña, porque la mitad piensa que este conflicto es argentino y no internacional.