Entre los cortes de ruta y el lockout de los empresarios del campo, el transporte de carga cayó un 21 por ciento en mayo con respecto al mismo período del año pasado. En ese mes impactaron con intensidad la medida de no comercialización de granos debido a que los productores rurales “optaron” por no vender “hasta que no mejoraran las condiciones de mercado”, a lo que se le sumaron los cortes que no permitieron el paso de los camiones de aquellos que sí pretendían trabajar. De todas maneras, pese a ese resultado en el rubro transporte de carga, el consumo global de servicios públicos registró un aumento del 10,6 por ciento, encabezado por el sector de telefonía.

A mediados de mayo las entidades decidieron finalizar con la no comercialización de granos y abandonar los cortes de ruta, que a principios de ese mes se habían hecho extensivos a camiones de carga internacional y de hacienda. En algunos pueblos, como Gualeguaychú, se llegaron a realizar cortes totales. El levantamiento de la protesta se realizó, por un lado, porque era un requisito que ponía el Gobierno para reunirse a dialogar y también, según sostenían desde algunas entidades, para que los ruralistas que se encontraban en una situación financiera comprometida “pudieran respirar un poco vendiendo algunas toneladas, lo mínimo posible”. Las negociaciones no prosperaron y los cortes volvieron. Así, la caída en el sector de transporte de carga rondó el 26 por ciento en términos desestacionalizados si se lo compara con abril, cuando también existió una tregua en la que sí se comercializaron granos.

Pero los camiones no fueron los únicos que sufrieron con el lockout. Ferrocarriles, aviones y ómnibus también perdieron terreno durante mayo. La carga transportada en el servicio ferroviario nacional mermó un 23 por ciento con respecto a igual mes del año anterior, acumulando así una baja del 3,2 por ciento en los primeros cinco meses de 2008. Por su parte, la carga que se desplazó a través del servicio de aeronavegación comercial creció en términos agregados un 5 por ciento, cuando durante los meses previos las subas estaban por encima del 30 por ciento. Los vuelos de cabotaje cayeron un 51,3 por ciento en forma interanual.

El que sí pudo sortear el lockout fue el sector de telefonía, con un incremento que superó el 30 por ciento. Los mensajes de texto que se enviaron en mayo superaron los 4 millones, un 50 por ciento más que el mismo mes del año pasado. Pero los SMS no estuvieron fuera del conflicto. Por su parte, la cantidad de pasajeros transportados en los distintos servicios aumentó 3,5 por ciento. En ómnibus metropolitanos hubo una baja de 0,8 por ciento, mientras que los ferrocarriles urbanos experimentaron un alza del 9,1 por ciento y en subterráneos de 23,8 por ciento, siempre comparando con mayo de 2007. Mientras tanto, la cantidad de pasajeros que viajaron en avión descendió 6,1 por ciento. En los vuelos de cabotaje la caída fue de 12,9 por ciento y en el internacional, de 2,2 por ciento.