A treinta y dos años de la Noche de los Apagones del Terror –cuando la dictadura secuestró a cuatrocientas personas con el apoyo del poder empresarial– el pueblo de Libertador General San Martín se prepara para una nueva Marcha del Apagón. Es la número veinticinco desde que Olga Arédez y otras madres y esposas de desaparecidos empezaron a reclamar “aparición con vida” en el pueblo del poderoso ingenio Ledesma.

“Porque ellas nos marcaron el camino”, es el lema de la marcha y de las Jornadas de Derechos Humanos del NOA, que comenzaron el 19 y seguirán hasta el 24. El sábado las actividades estuvieron centradas en la localidad de Calilegua donde Madres, Hij@s y Familiares de Detenidos-Desaparecidos, Tupaj Katari, Seom, Partido Obrero, Pueblos Originarios, Libres del Sur, Barrios de Pie y Mocaju, entre otros, realizaron una vigilia y fogón con la presencia de Horacio Fontova y otros artistas.

Hoy habrá actividades en Libertador, con charlas y video-debate, mañana será una jornada juvenil con talleres de murga. El jueves 24 a las 10 habrá un acto en la Escuela Normal y a las 15 se realizará la tradicional marcha, de Calilegua a Libertador, con parada en el Monolito de la Memoria. Cerca de las 18 cuando los manifestantes lleguen a la plaza de Libertador, depositarán las cenizas de una de las madres fundadoras, Olga González de Herrera, mamá de Nino Herrera. La jornada concluirá, como todos los años, con un Festival Solidario de la Memoria, a las 21.

Alrededor de esa plaza daba vueltas Olga Márquez de Arédez y sus cenizas también fueron enterradas bajo una Santa Rita, una de sus plantas preferidas. La casa familiar –donde vivió con sus hijos Luis, Ricardo, Adriana y Olga, y su marido, el médico Luis Arédez que enfrentó al ingenio de los Blaquier cuando fue su empleado y también como intendente– ahora se transformó en un Centro de Acción Popular que lleva su nombre (Capoma). “Se trata de un grupo de militantes y solidarios que ven la necesidad de aportar soluciones a las sistemáticas violaciones a los derechos humanos que se registran diariamente en el país, formados por las Madres de Detenidos-Desaparecidos de Ledesma, para continuar con su proyecto de un país para los que menos tienen”, definió Ricardo Arédes, en medio de la organización de los actos en Libertador.