La Sala B de la Cámara en lo Penal Económico confirmó los procesamientos de diez de los acusados de la causa Skanska, que tramita en el fuero penal tributario, pero lo hizo sólo en forma parcial. El tribunal avaló imputaciones por evasión al IVA de la constructora sueca, pero revocó y anuló otras, varias de ellas referidas a la “tentativa de evasión del impuesto a las ganancias”. El juez Javier López Biscayart, a cargo de la investigación, tendrá que profundizar algunos puntos y dictar una nueva resolución. El juicio oral, que se perfilaba cercano, quedará inevitablemente demorado.

La causa a cargo de López Biscayart fue la que destapó la olla del caso Skanska más de dos años atrás. El magistrado investigaba maniobras de evasión tributaria de la compañía con el uso de facturas truchas. En la recolección de pruebas quedó en evidencia que aquellos comprobantes apócrifos también se utilizaron para cubrir salidas ilegales de dinero en las obras de dos gasoductos encomendadas por el Ministerio de Planificación Federal.

El expediente sobre posibles sobreprecios y coimas está en el fuero federal, aún sin ningún procesado. Peor todavía, este mes habrá indagatorias por tercera vez. En la causa por la evasión fiscal, López Biscayart procesó a varios ejecutivos de Skanska, un contador intermediario, varios personajes vinculados con sociedades fantasma (dedicadas a comercializar papelería trucha) y el ex gerente de Nación Fideicomisos, Néstor Ulloa, que administraba los fondos para la construcción de los gasoductos en cuestión. Todos apelaron.

La Cámara, con los votos de Carlos Pizzatelli, Marcos Gravibker y Roberto Hornos, resolvió los planteos del contador Alfredo Greco y de los ex directivos de Skanska Alejandro Gerlero, Juan Carlos Bos, Atilio César Fuentes, Eduardo Varni, Javier Azcárate, Héctor Obregón, Gustavo Vago, Roberto Zareba y Sergio Zerega. La resolución, en rigor, confirma sus procesamientos por evasión tributaria, pero a su vez los beneficia porque revoca y anula parte de la imputación que había elaborado López Biscayart, que resultó cuestionada por los camaristas. El tribunal de alzada tiene pendiente revisar también la situación de Ulloa.

Así las cosas, es posible que pasen meses hasta que haya un nuevo pronunciamiento. Sólo una parte de la pesquisa estaría en condiciones de llegar a un juicio oral y seguramente tendrá que seguir esperando.