A trece años de la explosión de la fábrica militar de Río Tercero que borró huellas fundamentales de la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia, Carlos Menem consiguió que la Cámara Federal de Córdoba anule su indagatoria por ese atentado y, en consecuencia, su procesamiento. El tribunal argumentó que la citación sólo había sido promovida por la querella pero no por la fiscalía. La resolución le da aire al ex presidente para dilatar los tiempos judiciales y le abre una puerta para plantear la prescripción. De todos modos, los fiscales que intervienen tendrían otra oportunidad para llamarlo a declarar como sospechoso.

El fallo, firmado por los camaristas Ignacio María Vélez Funes, Luis Roberto Rueda y María Alba Iriarte de Lofiego, confirma también la falta de mérito del ex jefe del Ejército Martín Balza. Esto implica que si bien aún no habría pruebas para imputarlo, seguirá siendo investigado. Al igual que en el caso de Menem, los jueces invalidan la indagatoria de Heriberto Baeza González, ex asesor de asuntos militares del Ministerio de Defensa. En cambio, confirman el procesamiento de Norberto Osvaldo Emanuel, ex subinterventor de Fabricaciones Militares.

Menem fue procesado en agosto último por el juez subrogante de Río Cuarto Oscar Armando Valentinuzzi como coautor de los delitos de estrago doloso seguido de muerte, con penas de 12 a 20 años de prisión. Según el magistrado, recuerda la Cámara, la fábrica de Río Tercero había sido un “centro de almacenamiento y distribución de pertrechos que salieron clandestinamente rumbo a Ecuador y Croacia”, maniobra facilitada por tres decretos del ex presidente que señalaban Ecuador y Venezuela como destinos falsos. La explosión, decía el juez, apuntaba a “ocultar el origen, las formas y los medios utilizados” para aquella “operatoria ilegal con armamentos” que, ya había tomado estado público, y respondía a “decisiones adoptadas en Buenos Aires en el centro mismo del poder”.

La Cámara cordobesa no entra en ese análisis de fondo sino que se limita a señalar que Valentinuzzi “dispuso indebidamente la citación” a “indagatoria” de Menem ya que no había en relación con él un “requerimiento fiscal”. Por entonces aún intervenía el actual ministro de Seguridad bonaerense, Carlos Stornelli. Sólo la querella había impulsado la acción. El riojano fue a la indagatoria en Córdoba en diciembre de 2007, pero se negó a contestar preguntas. Presentó un escrito en el que exhibía la misma teoría que defendió apenas ocurrió el estallido, el 3 de noviembre de 1995: que había sido un accidente. En la explosión murieron siete personas y hubo 300 heridos. El episodio sirvió para ocultar un faltante de unas 35.576 unidades (entre proyectiles, municiones y explosivos).

La Cámara declara la “nulidad absoluta e insubsanable” del llamado a indagatoria, de octubre de 2007, y con eso cae el procesamiento. Como la decisión retrotrae el proceso, la defensa volvería a plantear la prescripción. La abogada querellante Ana Gritti, cuyo marido murió en la explosión, le dijo a PáginaI12: “Acá no hay nada definitivo; lo único que se ha señalado es un vicio procesal, la causa vuelve a Río Cuarto y los fiscales podrán pedir la indagatoria con fundamentos”. Gritti no cree que haya prescripción. Volvería a cuestionar la falta de mérito a Balza.