Los dirigentes de la oposición hicieron flamear nuevamente ayer las banderas del “diálogo”, la “tolerancia” y la “calidad institucional”. Al cumplirse ayer 36 años del histórico abrazo entre Juan Domingo Perón y Ricardo Balbín, un homenaje en el Salón Azul del Senado fue el pretexto para reunir a peronistas duhaldistas y menemistas, radicales, cobistas y macristas. “Ellos demostraron que el diálogo y la tolerancia estaban por encima de las diferencias ideológicas personales”, dijo el senador Juan Carlos Romero, organizador del acto y redactor del proyecto aprobado por unanimidad en la Cámara alta. El kirchnerismo brilló por su ausencia.

El homenaje sirvió de reencuentro para muchos hombres que supieron estar en lo más alto del poder pero que hace años no frecuentan esas esferas políticas. Hubo una importante presencia del menemismo y del duhaldismo, con Eduardo Menem a la cabeza, seguido por el ex secretario de Cultura Jorge Asís, los ex funcionarios Moisés Ikonicoff y Miguel Angel Toma, jefe de la Side durante el gobierno de Eduardo Duhalde. La senadora Hilda “Chiche” González y el ex funcionario de la gestión de su marido Alieto Guadagni se sentaron en las primeras filas. Un poco más atrás se vio al ex diputado Daniel “Chicho” Basile y a Teresita González Fernández, quien volvió a compartir aunque sea por un rato el techo con su ex marido, Felipe Solá. Dos peronistas que hasta hace poco eran parte del oficialismo también se sumaron al homenaje: el ex titular del Comfer Julio Bárbaro y el ex embajador en Estados Unidos José Octavio Bordón.

Por el radicalismo estuvieron los jefes del partido y muchos dirigentes históricos. El titular de la UCR, Gerardo Morales, el presidente del bloque de senadores, Ernesto Sanz, y el titular del Comité cordobés, Mario Negri, representaron a la actual conducción nacional. Asistieron también Leopoldo Moreau, Antonio Berhongaray, Raúl Baglini, Carlos Maestro. Rafael Pascual, Jesús Rodríguez y Mario Losada. Los dos senadores ex radicales K Pablo Verani y Emilio Rached no dejaron pasar la oportunidad.

Solá y los diputados de su flamante bloque opositor llegaron una vez empezada la ceremonia. Uno de los organizadores le ofreció un lugar al ex gobernador bonaerense, que gentilmente lo rechazó para quedarse parado en una de las primeras filas al costado del Salón Azul del Senado.

Una de las caras que desentonó entre los presentes fue la del senador santafesino Carlos Reutemann, integrante del bloque oficialista. Cerca de él estaba el gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá.

Cuatro ex presidentes mandaron sus adhesiones, todas con el mismo tono de celebración de aquel gesto “democrático” que fue el encuentro entre Perón y Balbín: Isabel Martínez de Perón, Raúl Alfonsín, Carlos Menem y Eduardo Duhalde. Quizá la más afectuosa fue la de Menem, dirigida a su “querido amigo y hermano” Juan Carlos Romero, quien fue su compañero de fórmula en 2003. La más inesperada fue la de Isabelita. Algunos de los presentes señalaron con cierta sorpresa que Fernando de la Rúa no haya enviado una carta. Los fugaces ex presidentes constitucionales Ramón Puerta y Adolfo Rodríguez Saá estuvieron en las primeras filas. Las ausencias de Juan Carlos Camaño, actual funcionario del Ministerio de Planificación, y Néstor Kirchner fueron previsibles.

Con la participación de Julio Cobos se integraron al homenaje algunos de sus hombres, como el diputado Daniel Katz. El vicepresidente vaticinó que “se avecinan tiempos complicados” y llamó a lograr “acuerdos entre los partidos para alcanzar una política que nos permita proyectar un país de largo plazo”. Previamente, el titular de la UCR remarcó el abrazo de los dos dirigentes, que “sintetizó la necesidad histórica de dejar de lado los desencuentros” y “la importancia del dialogo y la tolerancia”.

Más allá de los dos partidos involucrados en el recordatorio, hubo un lugar para los diputados de PRO Federico Pinedo y Christian Gribaudo, y para el titular de Recrear, Esteban Bullrich.