La directora nacional de Aduanas, Silvina Tirabassi, confirmó al juez federal Octavio Aráoz de Lamadrid que el diputado nacional Francisco de Narváez efectuó tres llamadas telefónicas al traficante de efedrina Mario Roberto Segovia. La presentación ante la justicia la efectuó el propio De Narváez el lunes 14. Dijo que se ponía a disposición para ser investigado, ya que en una página de Internet se difundió que existiría una denuncia penal en su contra por tráfico de efedrina. El viernes 17 el juez remitió el pedido de informes a la Aduana y a la Administración Federal de Ingresos Públicos. Según la respuesta de Tirabassi, De Narváez aparece mencionado en un informe de la firma Nextel, que “se encuentra glosado a los autos N° 5564 caratulados `Benítez, Héctor Germán y Esquivel, Delia Alejandra, s/Av. de Contrabando’, en trámite por ante el Juzgado Nacional en lo Penal Económico N° 1 a cargo del doctor Ezequiel Berón de Astrada, Secretaria N° 1 de la doctora Graciela Guerscovich, en los cuales la Dirección General de Aduanas es querellante.

En dicho informe se señala a “Francisco de Narváez realizando llamadas a Héctor Germán Benítez (nombre usurpado por Mario Roberto Segovia, quien se encuentra imputado por contrabando en dichos autos)”. Añade la directora de la Aduana que el informe de Nextel “consta de un listado de llamadas telefónicas que se habrían cursado desde y hacia los abonados entre el 01/06/06 y el 30/09/06” (es el que se reprodujo en esta página el domingo pasado). En las planillas de Nextel, continúa Tirabassi, “se da cuenta de tres llamadas originadas desde el número 1154512227 al número 1149945396 [de Segovia] el día 25/6/2006 (12:58:01 hs) con una duración de ciento siete (107) segundos, el día 1/9/2006 (20:12:50 hs.) con una duración de ochenta y cuatro segundos (84); y el día 1/9/2006 (20:24:26 hs.) con una duración de cuatro segundos (4), en todas: consignándose en la columna “Emp. Orig: De Narváez, Francisco”. El 11 de agosto de 2008, con el propósito de obtener un “cuadro de relaciones” de Segovia, la Aduana pidió al juez que requiriera a las empresas de telefonía fija y/o móvil el abonado con su respectivo domicilio, al efecto de una posterior citación a prestar declaración testimonial”. El juez no lo dispuso así y la Aduana insistió esta semana. El informe oficial también consigna que Segovia está procesado por contrabando de ricinina y aconitina (sustancias que servirían para la elaboración de agresores químicos) en los autos N° 5587 “Benítez, Héctor Germán, Excel Import Export s/Av. de contrabando” del mismo juzgado penal económico Nº 1, Secretaría Nº 1, y en los autos N° 422, “Euromac S.R.L. s/Inf. Ley 22.415” en el juzgado Nº 6, Secretaría Nº 12 del mismo fuero “por contrabando de exportación consumado de efedrina oculto en un cargamento de 12 toneladas de azúcar con destino final los Estados Unidos de México, y autor de la tentativa de contrabando de efedrina en paquetes de azúcar detectada en el depósito Sadocks S.A., cuyo destino final también, serían los Estados Unidos de México”, e investigado en los autos N° 11.190 del juzgado Nº 5, Secretaría Nº 9 del fuero penal económico “por violación al régimen de franquicias diplomáticas” para la introducción de autos de lujo. En todas esas causas la Administración Federal de Ingresos Públicos –Dirección General de Aduanas– (AFIP-DGA), “se encuentra presentada en el rol de querellante”. El viernes 17, este diario consultó a De Narváez sobre el caso:

Página/12 –¿Conoce a Mario Segovia, detenido por el tráfico de efedrina?

Francisco de Narváez –No. Nunca tuve ningún contacto con él.

Página/12 –Segovia usaba un documento a nombre de Héctor Germán Benítez. ¿Tampoco lo recuerda?

Francisco de Narváez –No. Jamás lo oí nombrar.

Dos días después de esa publicación, los periodistas Marcelo Zlotogwiazda y Ernesto Tenembaum, entrevistaron a De Narváez por televisión. El filántropo colombiano dijo que cualquiera puede consultar su patrimonio en la página electrónica del Congreso de la Nación. Vale la pena hacer la prueba. Lo único que figura en la página de Diputados es la nómina de aquellos legisladores que presentaron su declaración jurada, entre ellos De Narváez, pero nada dice del contenido de esa declaración. La ficha del diputado De Narváez en la página del Congreso tiene un link que remite a su página personal, pero en ninguna de ellas figura dato alguno acerca de su patrimonio, con el que, según él mismo dice, paga su campaña proselitista, la más costosa que se recuerde para una elección legislativa. El diálogo terminó así:

Tenembaum –¿Qué se siente tener decenas de millones de dólares? Una sensación de “qué bueno, puedo hacer la plancha”, una sensación de que “y ahora para qué me sirve la vida”?

Francisco de Narváez –Primero, compromiso con mis hijos porque mucho de eso yo lo he recibido y (debo) tranferírselo a ellos, y después hacer lo que estoy haciendo. En la Argentina tenemos que volver a reconocer que se puede prosperar laburando y tener decenas de millones y ser un tipo honesto, pagar los impuestos y laburar para tu país”.

Nadie tuvo el mal gusto de mencionar la palabra Nextel.