Jorge “Huevo” Ceballos es tercero en la lista de candidatos a diputados nacionales que encabeza Martín Sabbatella en Buenos Aires y asegura que una buena elección de Nuevo Encuentro ayudará a construir “una alternativa popular y progresista en todo el país”. El abogado y dirigente de Libres del Sur afirma que el mote de piquetero con que lo señalan algunos medios periodísticos es una actitud “discriminatoria y denigratoria de los sectores humildes” y responde a un “clientelismo clasemediero” de quienes “adaptan su conciencia de acuerdo a quien les pague”.

–Usted lanzó su candidatura a diputado nacional al mismo tiempo que rompía con el Gobierno, del que fue funcionario. ¿Por qué?

–Me pareció que era el momento en que había que empezar a construir algo nuevo, a plantear una alternativa. Ya eran claras las señales de agotamiento de la experiencia kirchnerista por su decisión de asentarse en la estructura del PJ, sobre todo en la provincia de Buenos Aires, con su relación con los intendentes del conurbano y sus peores prácticas. Por otro lado, la oposición, que se plegó a las patronales del campo, se ubicaba a la derecha del Gobierno y lo sigue estando.

–¿Cómo decidieron este frente electoral con Sabbatella?

–Ya veníamos charlando con Martín y siempre decíamos que teníamos coincidencias, aunque estuviéramos en distintos lugares. Como también coincidíamos en la necesidad de armar y ampliar una nueva propuesta, y así comenzaron las charlas con la gente del SI, la CTA, con Pino Solanas, con todos. Por suerte, pudimos construir esto que es el Nuevo Encuentro.

–¿Por qué fracasaron las negociaciones entre los integrantes de Nuevo Encuentro y Proyecto Sur, a pesar de las coincidencias entre ambas fuerzas?

–Faltó madurez, porque indudablemente había que buscar la unidad. Consideramos que en Capital era necesario unir a todo el progresismo. En el caso de la provincia, los convocamos y ellos no estaban de acuerdo. Tenemos coincidencias y respeto mucho la trayectoria de Pino, pero la unidad sigue siendo una tarea pendiente. Este es apenas el primer paso, y no es poco: hace muchos años que los sectores progresistas no tenían una opción propia en la provincia.

–En Buenos Aires van con Sabbatella, pero en otros lugares comparten alianzas con el justicialismo y el Frente para la Victoria. ¿Qué es lo que aspira a consolidar Libres del Sur con alianzas tan heterogéneas?

–Esta es nuestra propuesta. La provincia de Buenos Aires va a ser un ordenador nacional. En el resto del país los espacios progresistas estamos muy fragmentados, aun en provincias donde se han hecho buenas elecciones, como Salta o Neuquén. Si logramos hacer una buena elección en Buenos Aires, podremos avanzar en dirección de esa unidad necesaria.

–Usted es abogado, ¿le molesta que lo definan como piquetero?

–Sé que tiene un contenido discriminatorio, porque por ejemplo no se lo dicen a Biolcati. Yo nunca corté tantas rutas como él, ni desabastecí a ningún argentino. Eso tiene que ver con un determinado sector de la prensa que está vinculado al poder y tiene ese trato discriminatorio y denigratorio para un sector social y que nunca trata con la misma vara a un representante de los sectores humildes que a un representante de los sectores de poder. Hay un clientelismo de las clases medias, como el que hacen algunos profesionales de las consultoras que no expresan fielmente su trabajo y lo hacen a favor de determinados sectores, adaptan su conciencia de acuerdo con quién les pague. Si eso no es clientelismo, qué es. Igual me siento orgulloso de ser parte de un movimiento social, y si hoy soy candidato es por decisión de quienes lo integran.

–Desde el peronismo disidente y el Acuerdo Cívico dicen que hay que vencer al kirchnerismo. Para Nuevo Encuentro, ¿a quién hay que vencer?

–Hay que vencer al bipartidismo. Hay que construir una alternativa autónoma que represente toda esa expectativa y entusiasmo que se generó en 2003. La oposición está a la derecha del Gobierno, no tengo ninguna duda, De Narváez fue financista de Menem y en el Acuerdo Cívico y Social están los ex ministros de la Alianza. Pero en la propuesta oficial también está la derecha, no como aseguran algunos sectores intelectuales que teorizan sobre categorías ideológicas: para mis vecinos y compañeros de Merlo, la derecha es Othacehé, el intendente del PJ, donde la gente se muere por causas evitables y te persiguen porque pensás distinto.