Hugo Moyano visitó ayer a Mauricio Macri, quien lo invitó para contarle cómo imagina Buenos Aires en el 2020. Aunque las expectativas estaban centradas en lo que pudieran hablar acerca del conflicto que a principios de esta misma semana paralizó la recolección de residuos en la ciudad, no fue ése el tema que surgió formalmente en la reunión, sino el del “pase a planta permanente” de los empleados públicos cuyos contratos vencen a fin de año. Lo planteó el secretario general del sindicato de municipales, Amadeo Genta, uno de los escuderos que Moyano llevó a su encuentro con el jefe de Gobierno.

La de ayer fue la primera visita formal que en su condición de jefe de la CGT Moyano realizó a la Jefatura de Gobierno desde que Macri conduce la ciudad. La central sindical fue invitada a participar de la ronda de diálogo que Macri organizó con organizaciones políticas y sociales para intercambiar ideas acerca de Compromiso 2020, un compendio de iniciativas a implementar al cabo de la próxima década que el jefe de Gobierno presentará en poco tiempo más. En ese marco, Macri mantuvo ya unas quince reuniones con representantes de distintas entidades. Los próximos en su agenda –las fechas aún no fueron confirmadas– son el secretario general de la CTA, Hugo Yasky, y el titular de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo.

Moyano fue a la reunión junto con Genta, Omar Viviani (taxistas) y José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), entre otros. Macri lo recibió en el Salón de Acuerdos de la Jefatura de Gobierno –contiguo a su despacho en el primer piso– en compañía del jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta; el secretario General, Marcos Peña; los ministros Guillermo Montenegro (Justicia), Néstor Grindetti (Hacienda), Juan Pablo Piccardo (Espacio Público) y el vicepresidente primero de la Legislatura, Diego Santilli.

“Fue un muy buen encuentro, donde se dio un espacio plural para mirar la ciudad a largo plazo”, sintetizó Peña y explicó que la idea de Macri es que ese tipo de encuentros sean “un disparador para plantear los temas estructurales de la ciudad saliendo de las lógicas sectoriales”.

El diálogo de Macri y sus funcionarios con los representantes de la CGT se prolongó por más de una hora. Distintos participantes coincidieron en señalar que, a pesar de las expectativas generadas, el tema de la basura no se coló en la conversación formal. Uno de ellos fue Genta, quien también dijo que la reunión fue “muy buena” porque se buscó “el mejoramiento de las políticas” de la ciudad.

El referente de los municipales del Sutecba contó que se discutió, en cambio, el “pase a planta permanente” de los contratados. En la administración porteña hay unos dieciséis mil empleados cuyos contratos vencen el próximo 31 de diciembre y cuya estabilidad laboral no está garantizada más allá de esa fecha. El temor de la amplia mayoría es que Macri quiera deshacerse de ellos.