La Cámara Federal confirmó el procesamiento del “arrepentido” ex secretario parlamentario de la Cámara de Senadores Mario Pontaquarto por presunto peculado y administración fraudulenta en perjuicio del Estado. A Pontaquarto se le atribuyó haber retirado de la Tesorería del Senado, en junio de 1999, 6600 dólares destinados a la adquisición de pasajes aéreos y viáticos, para asistir a una conferencia en Lisboa, Portugal, y no haber rendido ni devuelto el dinero, “pese a que se comprobó su inasistencia” al evento. También fue responsabilizado por no haber devuelto distintas sumas de dinero (por un total de 32.500 pesos) que retiró de la Tesorería de la Cámara baja entre julio de 1996 y enero de 2000 en concepto de adelantos y anticipos de dieta. La sala I de la Cámara Federal evaluó que varios testigos declararon en contra de los argumentos del “arrepentido”, tal como se denominó a Pontaquarto luego de que confesara haber sido el encargado de distribuir, en abril de 2000, cinco millones de pesos de “coima” a varios senadores para que votaran modificaciones a la ley laboral. Los camaristas Jorge Ballestero, Eduardo Freiler y Eduardo Farah consignaron, además, que la investigación “permitió poner en evidencia la desorganización administrativa que reinaba en el Senado con anterioridad al 19 de diciembre de 2001, fecha a partir de la cual se estableció una serie de límites en materia de anticipos”.