El Comité Ejecutivo Nacional del Partido Socialista (PS), máximo organismo de conducción de la fuerza, se reunirá a principios de esta semana para definir la relación con el ARI de Elisa Carrió, que había quedado seriamente dañada luego de una serie de acusaciones cruzadas entre ambas agrupaciones.
Al encuentro irán las principales figuras de la fuerza, que integran la mesa chica de conducción: su titular, Alfredo Bravo; el intendente de Rosario, Hermes Binner; el diputado Rubén Giustiniani y los porteños Norberto La Porta y Raúl Puy. Además, se acercarán los representantes del PS en los diferentes distritos.
Según explicaba ayer un importante dirigente socialista, el principal tema a discutir es la relación con el ARI. La alianza, que lleva menos de dos años, se complicó a raíz de una serie de desencuentros políticos: los socialistas acusaron a Carrió de no consultarlos a la hora de tomar sus decisiones más importantes, de las que –según dicen– se enteran a través de los diarios. En el ARI responden que los socialistas hicieron gestos de independencia, como conformar su propio bloque en Diputados, y los acusan de lanzar un desafío a Carrió a partir de la presentación de un proyecto para despenalizar el aborto.
A pesar de los intentos de una comisión de enlace entre ambas fuerzas, que hasta ahora se reunió en una sola oportunidad, lo cierto es que el vínculo quedó dañado. Dentro del PS, algunos dirigentes, como Alfredo Bravo o el diputado Oscar González, buscan recomponer la relación con el ARI. Otros, en cambio, prefieren dar por cerrado el asunto y concentrarse en fortalecer el partido: incluso hablan de lanzar una fórmula propia, encabezada por Bravo o Binner, para las elecciones del 27 de abril.