EL PAíS › LAS ALTERNATIVAS QUE SE ANALIZAN ANTE EL ESTADO DE SALUD DE BALESTRINI
En los últimos días, dirigentes del partido comenzaron a discutir cómo seguirá la actividad interna. La posibilidad de que Hugo Moyano asuma la presidencia provisional del PJ provincial. Cerca de Scioli piensan en una mesa de consenso con intendentes.
› Por Alejandra Dandan
Hasta el día que sufrió un accidente cerebrovascular, Alberto Balestrini operaba como uno de los responsables del armado territorial del PJ en Buenos Aires. Contenía y equilibraba al peronismo desde dos escenarios clave, como presidente del partido bonaerense y como vice del gobernador Daniel Scioli. En los últimos días, mientras amigos y compañeros, todavía conmocionados por su estado de salud, lo acompañan en el hospital, se abren paso las discusiones sobre cómo continuará la actividad territorial del PJ. Las chances de que Hugo Moyano asuma la presidencia del partido inquieta a algunos intendentes, pese a que desde el entorno del secretario general de la CGT aclaran que, en este contexto y en estas condiciones, buscarían una política de “articulación y coordinación”. “¡No vamos a tirar todo por la borda!”, dijeron desde la CGT a Página/12.
Con el correr de los días, el rol de Balestrini parece hacerse más notable. “Para Néstor Kirchner era un alfil”, explica un miembro del consejo del partido. “Y para Daniel Scioli era una torre: lo defendía de todas las calenturas con los intendentes.”
La página web del PJ bonaerense refleja el estado en que quedó el peronismo provincial. La web actualiza cada seis o siete horas los partes médicos: “El doctor Alberto Balestrini se encuentra cursando el decimosegundo día de internación en la unidad de cuidados intensivos” del Hospital San Martín de La Plata, decía ayer. Balestrini siguió con el respirador artificial, pero sufrió una descompensación por una infección. A la tarde, tuvo “respuesta inestable en el mantenimiento de los parámetros vitales”, continuó “febril, con tratamiento antibiótico de amplio espectro”.
Los datos recorrieron velozmente despachos de funcionarios actuales y antiguos del peronismo bonaerense. “La verdad es que no hay ganas de discutir nada”, se sinceró un ex ministro, ahora parte del Ejecutivo nacional. “Estamos bajo estado de shock, yo estuve la semana pasa en La Plata y esto mismo les pasa a todos.”
Aun así, algunos análisis se abren camino. Un tema es el PJ. El partido, que en ocasiones “no deja de ser una formalidad porque la política la delinea Kirchner” –dice uno de los dirigentes del Evita–, puede convertirse en un problema. Tras la derrota de 2009, Balestrini terminaba de hacer una reconstrucción interna y había activado alguna de sus herramientas. El vicepresidente primero del PJ es Moyano, que se abre camino con un proyecto político de base sindical con miras a 2011. Pero dentro de la estructura del PJ arrastra problemas de convivencia con varios caciques.
“A Balestrini lo respetan porque lo sienten un par”, dice un colaborador de Scioli. “Fue intendente de La Matanza, con dos millones de habitantes, construyó en el territorio... No es que a Moyano no lo respeten, tienen el problema por los costos de la basura y no lo sienten como propio.”
El titular de la CGT podría asumir la presidencia provisional del PJ, aunque por la carta orgánica el proceso no es automático, debe ser ratificado por los consejeros. “Hablar de un plenario es prematuro –dicen desde su espacio–; Balestrini tendía puentes con encargados del manejo político, como los intendentes. En este contexto lo que vamos a hacer es tratar de coordinar trabajo con los referentes del territorio.”
Alrededor de Scioli piensan alternativas. Una es una mesa de consenso para la transición con un cuerpo colegiado de intendentes. Otra incluye a Moyano: “Hay que pensar en una comisión de acuerdo político, de todos los sectores del peronismo; la cabeza debería ser Scioli, aunque sea vice del PJ nacional, y Moyano tiene que cumplir un rol importante, con intendentes y compañeros representativos de todos los sectores del peronismo”, dice un dirigente de la provincia alineado al proyecto del kirchnerismo.
Otro tema es el interior del gobierno de Scioli. Balestrini tenía un rol clave como presidente del Senado y en la relación con los intendentes. Hace ya varios días, un grupo de funcionarios evaluaron el escenario a corto plazo. Estuvieron el jefe de Gabinete, Alberto Pérez; el ministro de Gobierno, Eduardo Camaño; de Desarrollo Social, Baldomero Alvarez; el subsecretario de Reforma Política, Isidoro Laso, y el vicepresidente del Senado bonaerense, Federico Scarabino. Por cuestión de formas, Scarabino será su reemplazante. El ex intendente de Quilmes, ex ministro de Carlos Ruckauf y de Felipe Solá, era la mano derecha de Balestrini en el Senado. Asumirá el lugar de gobernador cuando Scioli se ausente, pero volverá al Senado, porque su banca es clave.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux