En la causa que investiga la llamada “mafia de los medicamentos”, por adulteración y fraude al Estado, ayer fue detenido el empresario Gabriel Brito, dueño de la empresa Global Pharmacy y uno de los denunciantes del caso. El juez federal Norberto Oyarbide lo acusa de extorsión y de formar parte de la asociación ilícita que lideraba, presuntamente, Néstor Lorenzo. Además de Brito, el magistrado dispuso la detención de tres empleados de empresas del rubro. Por otra parte, el fiscal Luis Comparatore aceptó el pedido de la defensa del secretario general de la Asociación Bancaria, Juan José Zanola, para que cumpla en su domicilio la prisión preventiva; ahora debe decidir Oyarbide.

Brito fue uno de los denunciantes en el origen de la causa; sin embargo, el juez fue encontrando elementos en su contra y ahora está sospechado de haber pedido dinero a algunos de los involucrados en la causa a cambio de no divulgar información. Además, se le imputa la presunta falsificación de historias clínicas para cobrar subsidios del Estado por tratamientos que nunca se llevaron a cabo. El empresario, señalado como aportante a la campaña presidencial de Cristina Fernández –algo que él desmintió–, será indagado mañana por el juez. Anoche también fueron detenidas otras tres personas vinculadas con droguerías: Walter Mafini, Lidia Sinicol y Sergio Amarilla.

El fiscal Comparatore recomendó a Oyarbide que le otorgue a Juan José Zanola la prisión preventiva por razones de salud y precisó que, en caso de aceptarse el pedido de la defensa, deben tomarse “todas las previsiones” necesarias para asegurar que el sindicalista no se fugue ni obstruya la investigación.

En el marco de la causa por la “mafia de los medicamentos” ya están detenidos, además de Zanola, su mujer Paula Aballay, el empresario farmacéutico Néstor Lorenzo, la ex número dos del Policlínico Bancario Susana Fiona y el ex funcionario de la Anmat Miguel Cosme de Marcos. Además, hay otros veinte procesados con libertad condicional.