Los coordinadores del peronismo disidente se desviven por conseguir que en el acto del próximo viernes (en el que ese espacio prometió presentar su plan económico de cara a 2011) los cuatro precandidatos, Eduardo Duhalde, Felipe Solá, Alberto Rodríguez Saá y Mario Das Neves, coincidan ante las cámaras para dar una señal de unidad. Luego de dos semanas de acusaciones cruzadas y turbulencia, nada parece indicar que tendrán éxito: aunque habrá gestiones hasta último momento, sólo Duhalde –quien fuera apartado del grupo por sus compañeros, molestos por el protagonismo que se daba– confirmó su presencia. Los demás ya excusaron su ausencia y anunciaron el envío de emisarios. El ex presidente interino hizo un llamado a evitar “conflictos internos” que no tuvo eco entre sus –por ahora– todavía socios.

“Creo que todo el esfuerzo que debemos hacer en este momento debe estar dirigido, concentrado, a consolidar el espacio y no ir a los amigos periodistas a decirles ‘No, mirá tal cosa, tal otra’ que pueda generar conflictos internos porque eso es, por lo menos, levantarles una sonrisa a nuestros opositores, cosa que no es inteligencia política”, fue el reto que Duhalde se permitió hacerles a sus compañeros de ruta. La semana pasada fue excluido de una cena en casa de Francisco de Narváez: una forma de sus socios de demostrarle que no cae bien que se adjudique el liderazgo del espacio.

Duhalde le dedicó un palo al empresario nacido en Colombia. Aunque dijo que es “uno de los mejores candidatos del Peronismo Federal” para la provincia de Buenos Aires, dejó abierta la posibilidad de que deba enfrentar a otros aspirantes en la interna, algo que hasta ahora no aparecía en el horizonte. Y además, le prodigó un elogio a Daniel Scioli, quien sería el rival a vencer por De Narváez en las elecciones generales. Al ex motonauta “no le va tan mal” en las encuestas, reconoció Duhalde.

Detrás del tirón de orejas se transparenta la intención del ex bañero de volver al rebaño. Así queda de manifiesto en las declaraciones de su esposa, la senadora Hilda “Chiche” González, que sostuvo que el Peronismo Federal “está trabajando muy fuertemente para que, cualquiera sea el candidato, los demás entiendan que hay que acompañar”. Duhalde también es el único de los cuatro presidenciables que, según confirmaron fuentes de su entorno, asistiría al encuentro del viernes. La negativa de los otros tres podría llevarlo a cambiar de idea, para no quedar en offside.

La cumbre se llevará a cabo en un céntrico hotel porteño, y más allá de ser un encuentro entre cuadros técnicos y segundas líneas en el que, prometen, presentarán un primer boceto de plan económico, la idea es aprovecharlo para reforzar la (hoy por hoy meramente virtual) imagen de unidad del espacio, algo que perciben como su principal debilidad. Al menos eso manifestaron desde la mesa coordinadora (los dirigentes de primera línea que no serán candidatos: Carlos Reutemann, Jorge Busti, Adolfo Rodríguez Saá, Ramón Puerta y Juan Carlos Romero). “Confiamos en la asistencia de los cuatro”, dejaron caer, aunque, por ahora, parece complicado.