El resurgimiento de la posibilidad de armar una alianza electoral entre el vicepresidente Julio Cobos y el peronista disidente bonaerense Francisco de Narváez despertó un fuerte rechazo en el sector del radicalismo que se encolumna detrás de la candidatura presidencial de Ricardo Alfonsín. “No estamos de acuerdo para nada en una alianza con De Narváez. Somos un partido de centroizquierda y de ninguna manera queremos una construcción común con expresiones de la derecha”, resumió el titular de la UCR bonaerense, Miguel Bazze, parte del círculo íntimo de Alfonsín.

Otro de los referentes del alfonsinismo, el diputado Juan Pedro Tunessi, también salió a cuestionar la idea lanzada por el intendente de Junín, Mario Meoni. “Son los mismos que siempre postularon el poder por el poder mismo, sin importarles cómo, con quién y para qué”, disparó Tunessi.

Conscientes de que la provincia de Buenos Aires será el talón de Aquiles de la UCR en la próxima elección, el sector del radicalismo vinculado con el vicepresidente reflotó esta semana un viejo fantasma que espanta a los radicales orgánicos: una alianza con el empresario colombiano, ganador en las legislativas de 2009. Cobos y De Narváez coquetean desde hace varios meses con esta idea en sus múltiples encuentros, aunque públicamente se limitan a ratificar su buena relación y su trabajo en políticas de Estado para el país. Sin embargo, esta semana, Meoni, uno de los máximos referentes del cobismo bonaerense, no descartó compartir la boleta en 2011. “No hay dirigentes de la UCR que se estén instalando y en ese contexto no descartamos llevar a De Narváez como candidato”, dijo el mandatario local.

Más allá del rechazo de plano que genera De Narváez en otros sectores del radicalismo, fuentes del alfonsinismo señalan que estas declaraciones se producen cuando el vicepresidente viene sintiendo un descenso de su popularidad en las encuestas de opinión. Por su parte, Tunessi calificó a Meoni como “el alter ego cobista, que apareció diciendo lo que sus jefes no se animan a decir”. “Representa el pensamiento íntimo de Cobos y de quienes lo acompañan en la provincia de Buenos Aires, es decir la vieja alianza con el peronismo de derecha”, remató el diputado nacional, encargado en varias oportunidades de expresar lo que piensa Alfonsín.

El hijo del ex presidente –que estuvo de recorrido por La Matanza– apuesta a convencer a la líder del GEN, Margarita Stolbizer, para que se candidatee nuevamente a la gobernación y “arrastrar” votos con su postulación nacional. De todas maneras, reconocen que la provincia no será un distrito fácil y que si finalmente Stolbizer se mantiene firme en su decisión de no ser candidata deberán buscar otro candidato de urgencia.

El intendente de San Isidro, Gustavo Posse, figura como uno de los principales aspirantes cobistas a la gobernación. Sin embargo, sus chances frente al kirchnerismo y a De Narváez no despiertan mucho entusiasmo en las filas del vice.

Cobos y Alfonsín podrían volver a encontrarse la próxima semana, como en Tucumán hace menos de un mes. Desde ambos sectores aclaran, de todos modos, que no hay posibilidad de que acuerden no competir en las primarias abiertas.