“Las exhumaciones demuestran, con más certeza y con más contundencia, que en la última dictadura militar en Córdoba se llevó a cabo un plan sistemático de desaparición de personas instrumentado a través del terrorismo de Estado”, dijo Agustín Ditoffino, miembro de la agrupación H.I.J.O.S. de Córdoba al referirse al hallazgo de 9 cadáveres en fosas comunes en el cementerio San Vicente.
Los cuerpos, cuya identidad deberá ser confirmada ahora a través de exámenes de ADN, fueron encontrados dentro de la llamada causa Menéndez, que investiga la violación de derechos humanos en Córdoba. Entre los cadáveres encontrados por miembros del Equipo Argentino de Antropología Forense podría estar el de un joven cuya desaparición nunca fue denunciada por sus familiares, Daniel Oscar Barjacoa, fusilado junto a otros seis jóvenes en la “Masacre de Los Surgentes”, en octubre de 1976. Como se trata de un hecho hasta ahora no denunciado, podría dar lugar a la apertura de una nueva causa en la que serían juzgados los responsables -incluido Luciano Benjamín Menéndez–, aunque hubieran sido amparados por las leyes de Obediencia Debida y Punto Final o los indultos.
Ditoffino explicó que la organización espera que la jueza federal Cristina Garzón de Lascano, quien ordenó la exhumación de los cadáveres, declare la nulidad de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final. “Hoy, los militares siguen con la misma idea de mentir a la sociedad, cuando niegan la existencia de esos planes y la existencia de desaparecidos”, afirmó.
“Estamos esperando la decisión que va a tomar la jueza, pero creemos que se tiene que ajustar con todos los elementos que hay, los fallos de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, de la Corte Suprema, donde avala la existencia de crímenes de lesa humanidad en la Argentina. Hay un repertorio de elementos y argumentaciones jurídicas para que en Córdoba se pueda esclarecer de una vez por todas lo que ocurrió en la dictadura y pueda haber justicia. Este es un proceso que se está dando en la Justicia argentina, que tiene que ver con todo un proceso social histórico donde, la sociedad civil tiene la necesidad de reconstruir su memoria, su pasado y tiene necesidad que exista justicia sobre los crímenes de lesa humanidad”, concluyó el miembro de H.I.J.O.S.