Distintas agrupaciones de desocupados del conurbano y la Capital Federal marcharon pacíficamente por la ciudad y se concentraron en la Plaza de Mayo para reclamar planes de empleo. En una vuelta de tuerca de lo que vienen siendo las protestas del sector, los piqueteros consiguieron ser recibidos por directivos de Repsol-YPF y pidieron a la empresa que, en vista de que ha obtenido fuertes ganancias, genere 50 mil nuevos puestos de trabajo. Antes de desconcentrarse los manifestantes sostuvieron que no obtuvieron respuestas favorables por lo que profundizarán un plan de lucha con cortes de ruta en diversos puntos del país.
La marcha fue convocada por el Bloque Nacional Piquetero (donde están el Polo Obrero, el Movimiento Tierra y Liberación y el Teresa Rodríguez) junto a los desocupados que encabeza Raúl Castells y el Movimiento Barrios de Pie, integrante de la CTA. En la Rosada, según informaron los piqueteros, los recibió el secretario de provincias del Ministerio del Interior, Vicente Russo. La demanda central formulada durante el encuentro fue que el Estado entregue directamente a las organizaciones los planes de empleo.
A partir de la asunción del nuevo gobierno, en la asignación de los planes pasaron a tener un rol central los municipios y sus Consejos de Crisis, cuya función es definir el listado de beneficiarios de los programas sociales. Las organizaciones de desocupados objetan que esos Consejos, que en teoría están integrados por representantes de distintos organismos sociales, de la iglesia y de los partidos políticos, terminan copados por punteros del PJ; avizoran, en el mismo sentido, que serán funcionales a un uso clientelístico de la asistencia social. En las últimas semanas, sin excepciones, todos los grupos de desocupados organizados han reclamado la firma de convenios directos, sin pasar por los Consejos.
La novedad de ayer, sin embargo, fue la reunión con representantes de Repsol, porque significó el primer reclamo abierto y formal por trabajo a una privatizada. Los piqueteros fueron recibidos en la sede central de la firma, ubicada sobre Diagonal Norte, por una delegación de la empresa; la petrolera, que fue elegida para el pedido por ser una de las privatizadas con mayores ganancias, escuchó la demanda y posteriormente distribuyó un comunicado de prensa. “Frente a la actual situación económica del país, Repsol YPF quiere informar que continúa con sus operaciones normalmente, manteniendo todas sus fuentes de trabajo en la Argentina”, consignó.
Los piqueteros anticiparon sin embargo que podría haber protestas específicas contra la empresa. “Es muy probable que definamos bloquear las entradas a las refinerías, porque si bien nos atendieron, la respuesta de la compañía fue que no pueden dar más trabajo”, dijeron anoche a Página/12 los dirigentes Néstor Pitrola, del Polo Obrero y Jorge Ceballos, del Barrios de Pie.
Las organizaciones se reunirán hoy por la mañana para definir su plan de lucha. Las que integran el Bloque Nacional Piquetero están preparando, además, un encuentro nacional de desocupados para el 16 y 17 de febrero. Su idea es convocar a un debate en la plaza de Mayo para el 16 y hacer una asamblea al día siguiente en Avellaneda. Los convocantes son una escisión de la antigua asamblea nacional piquetera, que hasta diciembre reunía a todos los grupos de desocupados del país. Ahora están divididos: por un lado la Corriente Clasista y Combativa y la Federación de Tierra y Vivienda; por el otro, el Bloque Nacional Piquetero.