Los radicales de Catamarca aseguran que triunfarán en los comicios provinciales del 2 de marzo próximo. Juran que las encuestas les son favorables y que la mala experiencia que supo ser el gobierno de la Alianza al mando de Fernando de la Rúa no será un problema. De todas formas, y por si acaso, no cesan en sus intentos por impedir la participación del senador del PJ, y desde hace poco un ultraalcahuete de Eduardo Duhalde, Luis Barrionuevo. Las huestes radicales promovieron impugnaciones ante la Justicia Electoral. En ella sostienen que el candidato no cumple con las exigencias que impone la Constitución provincial. Aparentando distancia de las intenciones del oficialismo catamarqueño, Barrionuevo sigue con su campaña proselitista. Ayer, por caso, arribaron a la provincia dos unidades médicas móviles con el objetivo de recorrer la geografía catamarqueña en el marco de una especie de Operativo Rescate pero sin Chiche Duhalde y sí con el rostro del candidato del PJ.
Por estos días, la Corte Suprema de Justicia de la Nación debe resolver la impugnación que hicieron ante la Justicia Electoral representantes del Socialismo Democrático, del Socialismo Popular, el Partido Movilización y donde la UCR local funge de autor intelectual de la medida. De acuerdo con lo que reza la Carta Magna local, Barrionuevo cumple con las exigencias de ser argentino, profesar la religión católica y tener más de 30 años. Sin embargo, y es lo que remarcan los demandantes, el candidato a gobernar la provincia debe acreditar alguna actividad laboral y, sobre todo, residencia inmediata de cuatro años. Barrionuevo, tal como indican los registros provinciales, tiene domicilio en Catamarca desde el 22 de febrero de 2002, fecha que le sirvió para transformarse en candidato y luego ser elegido senador por esa provincia. Los demandantes sostienen que el hecho de representar a la provincia en el Senado nacional no lo habilita a obviar los requisitos que impone el artículo 131 de la Constitución provincial porque dicho artículo también lo impide de manera expresa. Además invoca el Pacto de San José de Costa Rica que impide establecer limitaciones para postularse a candidato. Un alto funcionario del Ministerio de Justicia aseguró a Página/12 que, legalmente, la decisión no le compete a la Corte Nacional sino a la de la provincia de Catamarca. Y que, en la cuestión de fondo, su posición es por demás vulnerable, ya que el requisito que no cumplió no es para nada discriminatorio. Por lo demás, la Constitución nacional contiene exigencias aún superiores.
Mientras los radicales esperan el fallo de la Justicia y rezan para que los datos que muestran las encuestas con que cuentan sean ciertos, el senador sigue con su campaña por el extenso y montañoso territorio catamarqueño. Según relataron voceros radicales, Barrionuevo viaja entre dos y tres veces por día a la provincia en un avión Lear Jet privado que lo traslada desde Buenos Aires para evitar, de acuerdo con lo que consideran los radicales, “algún escrache que pueda sufrir en un avión de línea”.
Ayer, por caso, sostiene el oficialismo local que comenzó un particular “Operativo Rescate”, similar al que conduce la primera dama en Tucumán y otras provincias, pero donde los facultativos recetan medicamentos y anteojos para ser entregados recién el 3 de marzo, un día después de los comicios provinciales. Estas y otras maniobras son las que los radicales piensan denunciar en los próximos días y que contará con la participación del actual gobernador de la provincia, Oscar Castillo.