EL PAíS
› MARCHA DE LAS MUJERES DE NEGRO
El petróleo o la vida
Mujeres de Negro es una agrupación que se opone a la guerra. Ayer hicieron su primer acto en Buenos Aires, acompañadas por Abuelas y Madres.
› Por Santiago Rodríguez
Se llaman Mujeres de Negro porque simbólicamente así se visten y desde hace años vienen denunciando en distintas partes del mundo la violencia y los conflictos armados. Ayer hicieron su debut en la Argentina con una marcha hasta la embajada de Estados Unidos en Buenos Aires para protestar en contra de un ataque de ese país a Irak y no estuvieron solas: junto a ellas se movilizaron las Abuelas y Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora e importantes dirigentes del ARI y ninguna se cansó en ningún momento de gritar “No a la guerra”. Para todas fue un adelanto de la marcha convocada por numerosas organizaciones sociales, de derechos humanos y partidos políticos que se concentrará mañana en Las Heras y Pueyrredón a las 17.30 para marchar desde allí a la embajada norteamericana.
La marcha de las Mujeres de Negro no pasó inadvertida, no sólo por los problemas de tránsito que provocó en Plaza Italia a las seis de la tarde de ayer: lo que llamó la atención fue ver una manifestación protagonizada casi exclusivamente por mujeres y mucho más que estuvieran todas de negro.
El movimiento de Mujeres de Negro surgió en 1987 en Israel, cuando un grupo de mujeres –siguiendo el modelo de las Madres de Plaza de Mayo– salió a la calle a protestar contra la ocupación israelí de los territorios palestinos. Con el correr de los años se extendió a países como Yugoslavia, Italia, España, México, Alemania, Gran Bretaña, India, Turquía, Sudáfrica y Filipinas.
Las Madres de Línea Fundadora y también las Abuelas de Plaza de Mayo las acompañaron en su debut en la Argentina, aunque las que más aportaron a la manifestación fueron las Mujeres en el ARI, encabezadas por varias diputadas de esa fuerza. Entre otras estuvieron Irma Parentella, Marcela Bordenave y María América González. También participaron de la marcha la legisladora porteña Delia Bisutti y la ex diputada de la ciudad Dora Barrancos. La jefa del ARI, Elisa Carrió, había prometido ir pero finalmente no fue.
“Nos movilizamos porque no se puede permanecer pasivo frente a un tema como éste y porque creemos en la resolución política y pacífica de todos los conflictos”, explicó Marina Tarasiuk, de la filial argentina de Mujeres de Negro. Mucho más acostumbrada al lenguaje de ese tipo de manifestaciones, Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, destacó que “Bush es el mayor terrorista del mundo, cambia petróleo por vida. Basta de Bush”.
Las mujeres y la minoría de hombres con máscaras blancas que hicieron casi todo el trayecto de Plaza Italia hasta la residencia del embajador norteamericano en la Argentina –improvisado destino final de la marcha– al grito de “No a la guerra” llamaron también a “presionar al Gobierno para que se pronuncie en contra” de un eventual ataque de Estados Unidos contra Irak. Las Mujeres de Negro terminaron su marcha arrojando flores marchitas al interior de la sede diplomática. Como dijo Parentella, fue una suerte de “precalentamiento” de la manifestación convocada para mañana a instancias de lo resuelto por el Foro Social Mundial en Porto Alegre.
Subnotas