EL PAíS › LA PELEA ENTRE GABRIELA MICHETTI Y HORACIO RODRIGUEZ LARRETA POR SUCEDER A MACRI
La decisión del jefe de gabinete porteño de imprimir volantes con su foto, de color amarillo PRO y con sus cuentas de Facebook y Twitter para repartir entre los vecinos de la ciudad enfureció a su adversaria. El jefe de Gobierno tuvo que intervenir para parar la pelea.
› Por Werner Pertot
“Mi paciencia tiene un límite. O lo bajás vos o lo bajo yo.” El mensaje intempestivo entró al celular de Mauricio Macri, mientras estaba en una recorrida por Necochea. Se lo enviaba Gabriela Michetti, que estaba furiosa por la difusión que había hecho su contrincante interno, Horacio Rodríguez Larreta, de medio millón de volantes con su rostro y sus cuentas de Facebook y Twitter. Al instante, le llegó un segundo mensaje de texto del secretario general, Marcos Peña, advirtiéndole sobre el conflicto en ciernes. El jefe de Gobierno hizo un par de llamados y le contestó a Michetti con otro mensaje: “Quedate tranquila: ya lo bajé”. Los volantes –como el que ilustra esta nota– fueron retirados de circulación y no se usaron en una recorrida por las calles. Los larretistas juran que todavía se los puede encontrar en algún lugar recóndito de un CGP.
La eterna interna entre Michetti y Larreta, los dos posibles candidatos del PRO a suceder a Macri en la Ciudad, sigue sin resolverse. El líder de PRO aseguró que la decisión estará en la primera quincena de mayo y no da señales de cuál será el candidato que va a elegir. Hace poco, los hizo participar de una suerte de casting, en el cual tuvieron que explicarles a un centenar de dirigentes macristas cuáles eran sus debilidades y por qué motivo querían el trabajo (ser jefe de Gobierno).
Allí Larreta sorprendió a más de uno con recuerdos tristes de su infancia y problemas de pareja (contó que su madre murió y que la hija de su esposa le decía “gordo y feo”) y prescindió de sus powerpoints favoritos. Michetti, en cambio, intentó mostrarse ejecutiva y les dijo a los ministros que “este es mi equipo, no tengo otro”. Macri terminó el meeting empresarial con una foto de los tres sonriendo y dijo que en un mes se volverían a reunir para pasar por lo mismo.
La interna, mientras tanto, se mantiene como una guerra de baja intensidad. Larreta sigue apostando a que su imagen crezca con la gestión y más de un ministro se queja de que no aparece en ninguna de las publicidades oficiales junto a Macri. El único que logró escabullirse hace más de un año fue Diego Santilli, cuyo rostro apareció en los cines en medio de un dibujito sobre el reciclado. A Larreta esto le gustó bien poco. Por estos días, el jefe de Gabinete intentó mostrarse descontracturado: posó sobre una patineta y con skaters, se sacó una foto con Joaquín Sabina y habría otra en camino con Ricardo Arjona.
Pero lo que desató un nuevo conflicto entre los dos adversarios PRO fue la difusión de 540 mil volantes en los CGP en los que aparece Larreta en primer plano en la tapa, junto a Macri. Adentro, hay un mensaje de ambos y en la contratapa está el jefe de Gabinete hablando con “vecinos”. Por debajo, dice: “Escribime y enterate de lo que estamos haciendo” y deja sus direcciones de Facebook y Twitter y un mail “[email protected]”, que se corresponde tanto con su nombre de pila como con la “H” gigante de “Haciendo Buenos Aires”.
Los michettistas reaccionaron apenas vieron los volantes. Michetti habló con Marcos Peña e intercambiaron críticas a Larreta:
–Es una aberración. Lo ponen a Mauricio en situación de casi denuncia penal, porque hace campaña con los colores del gobierno –dijo ella.
–Me acaban de avisar. No lo puedo creer –le contestó él.
Los dos le mandaron mensajes de texto a Macri. El de Michetti fue inusualmente duro, pero el de Peña no se quedó atrás: “Este personaje usa los recursos públicos para beneficio propio”, tipeó. Macri reaccionó con cierta cintura política y mandó a retirar los volantes de una recorrida que se iba a hacer. Los volantes fueron archivados en algunos CGP. “Lo acabo de parar”, les contestó a Peña y a Michetti.
La ex vicejefa estuvo trabajando con el secretario general en los cambios estéticos para la campaña de este año que se pudieron ver el sábado en sombrillas con globos instaladas en distintas esquinas: los afiches dejaron de ser sólo amarillos y pasaron a ser de un multicolor “circense”. “No somos un color, somos una idea que crece”, twitteó Peña. El cambio es para evitar que los critiquen con que usan la gestión como campaña, algo que el volante de Larreta hubiera puesto en duda. En la reunión de gabinete del siguiente lunes, dicen los ministros michettistas que vieron con caras largas a Larreta y al subsecretario de Atención Ciudadana, Eduardo Machiavelli. Michetti no dijo nada. Pero sonrió.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux