EL PAíS
› SOLA CERRO EN LA ROSADA LA CANDIDATURA DE GIANNETTASIO
Con la bendición de Duhalde
Finalmente, el gobernador bonaerense Felipe Solá encontró un reemplazo para la esquiva Chiche Duhalde. La ministra de Educación, Graciela Giannettasio, será su candidata a vice y lo acompañará en la fórmula con la que competirá por la gobernación. Lo confirmaron ayer los voceros de Solá desde La Plata, unas horas después de que el propio mandatario se encontrara a solas con Eduardo Duhalde en la Casa de Gobierno. Aunque el nombre de Giannettasio venía dando vueltas desde hace tiempo, la decisión de hacerla candidata se concretó ayer al mediodía, cuando Duhalde bendijo su designación: o sea, influyó directamente para que se la nombrara.
Solá optó por Giannettasio a pesar de que su preferido entre los que competía por la candidatura a vice –que debían representar al duhaldismo “puro” para respetar el equilibrio de fuerzas del distrito– era el diputado José María Díaz Bancalari. La acompañante de Solá es una duhaldista incondicional que fue directora general de escuelas y senadora, y actualmente es ministra. Su carrera estuvo impulsada por su estrecha relación con Chiche Duhalde –es amiga íntima–; ese apoyo, justamente, fue decisivo para su incorporación a la fórmula de gobernador y vice.
La elección de Giannettasio empezó a definirse ayer al mediodía, en la Rosada. A esa hora, Solá ya había sugerido que la funcionaria podría ser su candidata a vice (“No la descarto para nada, sería un honor”, había dicho a la mañana) y llegaba a Balcarce 50 para firmar un convenio de “financiamiento ordenado” con la Nación. Sin embargo, el motivo principal de su visita era definir el nombre de quien lo secundaría en la lista. Para eso se reunió a solas con Duhalde. También dialogó en privado con el ministro de la Producción, Aníbal Fernández, cuyo nombre había sonado como otro de los posibles candidatos.
En su rol de anfitrión y virtual elector, Duhalde invitó a Solá con un almuerzo y luego, ya sin tantos testigos, exteriorizó su agrado por Giannettasio. “¿Quién la puede discutir a Graciela? –se preguntó en voz alta el Presidente delante de su invitado–. Fue senadora, diputada nacional y ministra de Educación nacional. Si vamos a hablar de galones, ella los tiene.” Solá interpretó esa opinión como lo que era, una señal explícita de aprobación. El martes pasado, Duhalde había mostrado la misma decisión en una reunión en Olivos con el gobernador y el presidente del PJ bonaerense, el eterno Manolo Quindimil.
Solá dejó a Duhalde y se retiró de la Rosada con la idea de que debía anunciar de inmediato a su candidata a vice. Unas horas después, ordenó a sus voceros que lo anunciaran a los periodistas. Mientras tanto, el Presidente recibía a su viejo amigo, el ex intendente de Avellaneda Baldomero “Cacho” Alvarez, con quien repasó encuestas y analizó el escenario electoral bonaerense. Los sondeos mostraban a Chiche superando el 20 por ciento de intención de voto en casi todos los distritos del Conurbano. Esos números podrían definir otra de las movidas que estudia el Presidente: la posibilidad de colocar a su mujer como primera candidata en la lista a diputados nacionales por la provincia.
Ayer, en el flamante comando de campaña del PJ bonaerense –integrado por Cacho Alvarez, Juan Garibotto, Tati Meckievich, más los intendentes Alberto Descalzo (Ituzaingó), Jesús Cariglino (Malvinas Argentinas) y Julio Pereyra (Florencio Varela)– no coincidían sobre el lugar que le correspondería a Chiche: algunos la ubicaban como cabeza de lista, mientras que otros reservaban ese lugar para Eduardo Camaño.