EL PAíS
› EL RADICAL QUIROGA RETUVO LA INTENDENCIA DE NEUQUEN
Un día difícil para Sobisch
El gobernador neuquino no pudo superar la valla de la capital en su proyecto hacia la reelección. Con su triunfo, Quiroga altera las alianzas y detona una posible crisis en el MPN.
Por Elio Brat
El radical Horacio “Pechi” Quiroga retuvo la intendencia de la ciudad de Neuquén capital tras triunfar en los comicios de ayer con un 49 por ciento de los votos por sobre los de su principal contrincante, el emepenista Federico Brollo, quien apenas logró el 37 por ciento del favor de los votantes. La parada de ayer era fundamental tanto para Quiroga como para el padrino político de Brollo, el gobernador Jorge Omar Sobisch. Mientras el actual intendente no sólo se jugaba su continuidad en el cargo sino también su pretendida intención de gobernar la provincia en el 2007, Sobisch pone en riesgo la posibilidad de ser reelegido en comicios que ahora menos que nunca se sabe cuándo se realizarán, aunque no pueden pasar más allá de septiembre u octubre de este año. La oposición al actual líder del Movimiento Popular Neuquino (MPN), tanto interna como extrapartidaria, se lo va a exigir. Mucho más después del resultado de anoche.
El monumento al General San Martín, en pleno corazón de la capital neuquina, fue el epicentro de los festejos de los adherentes al Pechi Quiroga. Lo curioso es que, por primera vez en la historia de esta ciudad, radicales y peronistas se abrazaban y festejaban juntos el triunfo de un candidato que los había unido, también por primera vez, en la intención de voto por un nombre político. Claro que allí se reflejaba el acuerdo firmado por Quiroga con el actual senador nacional Sergio Gallia, quien pretende llegar a ser proclamado gobernador por Unión por Neuquén en los comicios que se tienen que llevar a cabo este año en la provincia.
Otro dato no menos importante fue la presencia en los festejos frente a la municipalidad de afiliados emepenistas, simpatizantes de quien fuera cinco veces gobernador de esta provincia, el caudillo histórico Felipe Sapag. Y es que la interna del partido gobernante hace más de 40 años en Neuquén jugó un rol fundamental en el resultado final de estas elecciones municipales. Tanto el propio Sapag como sus principales delfines políticos –como ejemplo basta su ex ministro Gustavo Vaca Narvaja– jugaron fuerte a favor de la derrota del actual gobernador Jorge Sobisch. Y nadie duda, a esta altura del calor partidario existente entre las filas del MPN, que a partir de hoy mismo pondrán en cuestionamiento el proyecto encarnado por el actual mandatario y su pública intención de continuar llevándolo adelante en el tiempo.
Otra de las incógnitas que se abren a partir de los resultados conocidos anoche en la capital neuquina es cuál será la postura política que tomará el vicegobernador de Sobisch y sobrino de Felipe, el doctor Jorge Sapag. Hasta el momento, quien fuera su ministro de Gobierno en su gestión anterior y vicegobernador en la actual, forma parte nuevamente de la fórmula provincial junto a Jorge Sobisch. Pero a nadie se le escapa –y mucho menos al propio Sobisch– que en los últimos tiempos el mismo Sapag tuvo varios cortocircuitos políticos con respecto a algunas decisiones de su compañero de fórmula. Y nadie descarta que, conocida su intención de llegar al sillón de la calle Rioja en el 2007, el mismo Jorge Sapag pueda llegar a patear el tablero de su partido, renunciando a acompañar por segunda vez a Sobisch y proponiéndose en lugar de él por el favor de los miles de simpatizantes del Movimiento Popular Neuquino.
Con respecto al futuro de la flamante Unión por Neuquén, sus principales figuras rebozaban de alegría a la hora de evaluar los resultados electorales de ayer. Por el lado del gran triunfador, el Pechi Quiroga, tiene por delante cinco años (el que le queda y otros cuatro más) para ir cimentando la posibilidad concreta de llegar a ser gobernador de Neuquén. Y por el costado de sus aliados políticos –la mayoría del Partido Justicialista neuquino y también las huestes de López Murphy, al cual adhirió públicamente el mismo Quiroga desde hace un tiempo– la posibilidad, según ellos decían anoche en los alrededores del monumento aSan Martín, de ganar los próximos comicios que decidirán quién gobernará la provincia de Neuquén en el período 2004/2007.