A un día de las elecciones nacionales en la Asociación de Trabajadores del Estado, los sectores que disputan la conducción porteña se enfrentaron por la presentación de los padrones locales y reflejaron la división que sufre la Central de Trabajadores Argentinos. Referentes de la Lista Azul, alineada con el líder de la central sindical, el docente Hugo Yasky, denunciaron ante el Ministerio de Trabajo que la Junta Electoral –la misma que actuó en las elecciones nacionales de la CTA– no presentó los padrones porteños. La Lista Verde, actual conducción del gremio de los estatales y fiel a Pablo Micheli, ratificó que la nómina de electores “se entregó en tiempo y forma”. La Junta Electoral prefirió no hacer declaraciones, pero desde la cartera laboral dan por hecho que habrá problemas en los comicios.

La Lista Azul denunció que la Junta Electoral no había entregado la nómina de electores en la Capital Federal. “Sucedieron inconvenientes de la misma manera que los hubo en la elección en la CTA. La Junta Electoral es la misma”, advirtió Marcelo Frondizi, candidato a secretario general porteño por la lista que responde a Yasky. Esa lista sólo presentará candidatos en 12 distritos, incluida la Ciudad de Buenos Aires y las provincias de Corrientes, Buenos Aires, Santa Fe, Tucumán y Chubut entre otras.

La información fue desmentida por José Luis Matassa, candidato a la conducción porteña del gremio por la oficialista Lista Verde, que dirige ATE desde 1984. “El padrón entero fue entregado en tiempo y forma, en papel impreso y en soporte magnético a los apoderados de las tres listas que compiten”, detalló el candidato en referencia, además de la Azul y la Verde, a la Lista Bermellón. “Luego hubo un período de tacha en el que se descartaron aquellos que no trabajaban más en el Estado, que no contaban con la antigüedad requerida o que estaban fuera de término y así se llegó al padrón final, de cerca de 20 mil electores”, continuó.

Frondizi explicó que la postura de los azules “tiene que ver con el reconocimiento de la recuperación de una serie de banderas históricas de los trabajadores debido a la convicción del gobierno nacional, como la Asignación Universal, la reestatización de Aerolíneas y los fondos jubilatorios, la ley de medios”. La profundización del convenio colectivo y la carrera administrativa, la elaboración de un plan de viviendas, la “recuperación” de la obra social gremial y la creación de un centro de formación profesional son los ejes principales de la propuesta que encabeza el hombre que viene de la rama de salud mental porteña, que compartió la conducción gremial con Germán Abdala y con Micheli hasta que “empezamos a fijar una propuesta propia”.

Según Frondizi, el sector de Micheli “vació de propuestas y debate el gremio”. En la discusión sobre el pase de trabajadores a planta permanente, por ejemplo, apuntó que “para la Verde es todo o nada y no contempla la posición de muchos sectores, como nosotros, que entienden que se trata de un proceso, que hay que luchar pero saber ubicarse en el marco de la situación que vive el país, saber esperar”.

El reclamo utilizado como ejemplo por Frondizi es uno de los pilares que sostiene la lista que lleva a Matassa a la conducción del gremio en la Ciudad. En ese sentido, el actual secretario de Comunicación de ATE apuntó: “Nos caracterizamos por la constante renovación porque buscamos profundizar la democracia interna del gremio. Creemos que son momentos en que las decisiones colectivas son el camino a tomar. Somos una lista plural; la autonomía de partidos políticos, patrones y grupos económicos es nuestro eje”. Los otros ejes de la propuesta verde son las mejoras salariales y la realización de paritarias con “discusión libre y democrática”.