EL PAíS
› REPRESION POLICIAL EN LA EMBAJADA
Más guerra que paz
La marcha contra la guerra terminó en enfrentamientos entre la policía y los manifestantes. Cuatro Madres heridas. En el interior hubo protestas e incidentes.
› Por Laura Vales
La marcha contra la guerra frente a la embajada de Estados Unidos terminó con incidentes y represión policial, luego de que un grupo de manifestantes tirara piedras y molotovs contra el edificio de la sede diplomática, tras lo cual la policía dispersó la movilización con gases lacrimógenos y camiones hidrantes. Los disturbios se produjeron en la avenida Sarmiento y continuaron después sobre la avenida Santa Fe, con vidrieras de bancos rotas, y la avenida Libertador, donde desde una moto y un auto la Federal tiró gases a las Madres de Plaza de Mayo. “Cuatro de ellas fueron seriamente afectadas, con quemaduras en la boca, asfixia, problemas cardíacos y respiratorios”, denunció anoche Hebe de Bonafini.
El repudio fue convocado mediante cadenas de mails que propusieron encontrarse en Plaza Italia a las seis de la tarde del mismo día que comenzara la ofensiva contra Irak. Ayer la protesta reunió a un millar de personas, integrantes de la comunidad árabe, asambleas populares, agrupaciones piqueteras, organismos de derechos humanos y partidos políticos.
Los manifestantes caminaron detrás de dos pancartas en las que se leía “No a la guerra, sí a la paz”, encabezados por miembros de la Federación de Entidades Arabes (Fearab) junto a Adolfo Pérez Esquivel, las Madres, dirigentes de las organizaciones de desocupados, la CTA y los partidos de izquierda.
Una vez frente al edificio norteamericano, medio centenar de jóvenes del Movimiento No Pasarán prendieron fuego a un muñeco que representaba a George Bush junto a un tanque de cartón.
El edificio de la embajada fue rodeado de fuertes medidas de seguridad. Un doble vallado cortó la calle en el cruce de la avenida Sarmiento con Colombia. Los marchantes quedaron separados así del predio por una primera fila de rejas de metal, unidas entre sí por cadenas, detrás de las cuales había una segunda fila de bloques de cemento, tras los que se apostó el operativo policial con lanzagases, perros y camiones hidrantes.
Comenzados los incidentes y la represión, los manifestantes corrieron en dos grupos, el primero de ellos, en el que estaban las Madres, con dirección al Monumento de los Españoles.
Bonafini denunció anoche que en ese camino hacia la avenida del Libertador “fuimos brutalmente reprimidas con gases lacrimógenos arrojados desde una moto y un auto, ambos policiales, a muy corta distancia”, por lo que cuatro Madres sufrieron quemaduras y problemas respiratorios.
El segundo grupo corrió hacia Plaza Italia. En la retirada, el asfalto quedó cubierto con clavos miguelito, por lo cual algunos patrulleros quedaron varados.
“Esta fue una manifestación de parte de la izquierda, vinieron con Sergio Schoklender, con Hebe de Bonafini y con (Adolfo) Pérez Esquivel”, dijo en ese lugar a los medios –entre ellos Página/12– el comisario inspector Jorge Oriolo, quien a continuación amenazó: “Dicen que piden paz y tiran piedras. Que los que los traen empiecen a poner las barbas en remojo”.
Media hora más tarde, sobre la avenida Santa Fe hubo nuevos disturbios cuando un grupo de manifestantes rompió los vidrios de una sucursal del Banco Nazionale del Lavoro, en la esquina de Salguero, y un BankBoston ubicado a la altura del 3400 de la avenida. En el lugar hubo un detenido que quedó arrestado en la comisaría 32.
En el interior del país hubo marchas en Mar del Plata, Rosario, Córdoba y Neuquén, entre otras ciudades. En muchas de estas protestas los bancos fueron elegidos como símbolos a repudiar. En Córdoba, donde fueron detenidas dos mujeres, los manifestantes arrojaron piedras y huevos contra las sucursales de los bancos Galicia, Lloyds y Citi, además de quemar una bandera norteamericana. También hubo incidentes en Rosario, donde los desocupados de Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa dañaron vidrieras de comercios y de la hamburguesería McDonald’s.