EL PAíS › EL MACRISMO Y LA OPOSICIóN LEGISLATIVA EMPEZARON A NEGOCIAR CARGOS EN EL NUEVO GOBIERNO PORTEñO
Decidido a lograr la aprobación del Presupuesto 2012 con el aumento de ABL incluido, el PRO puso en juego lugares en la Auditoría General, el Consejo de la Magistratura y el Banco Ciudad. Los detalles de la negociación.
› Por Werner Pertot
Llegó la hora de la rosca. El 10 de diciembre está más cerca de lo que parece para los legisladores porteños que dejarán sus cargos. La aprobación del Presupuesto porteño con el aumento de ABL y otras leyes que impulsa el macrismo se están negociando por estos días. Y en esa negociación el PRO puso en juego los cargos de la Auditoría General porteña, el Consejo de la Magistratura y el Banco Ciudad. El kirchnerismo y la Coalición Cívica son los más proclives a llegar a un acuerdo, mientras que Proyecto Sur amenaza con judicializar las decisiones si lo excluyen de todos los repartos. Dentro del PRO, la interna es por quién conducirá la Legislatura: allí el peronista Cristian Ritondo le pelea la vicepresidencia primera a Oscar Moscariello.
Lo más probable es que las negociaciones finalicen cuando noviembre esté por terminar y que la cascada de leyes que quiere el PRO pase por una sesión maratónica previa al recambio. El principal interés del macrismo está, como es evidente, en pasar la Ley de Presupuesto y el aumento de ABL que llega hasta el 300 por ciento. Pero también tienen otros proyectos en mente: hay incluso una lista de 15 leyes de mayor prioridad que circula por los despachos opositores.
Para conseguir los votos para esas leyes el macrismo tiene para negociar tres cargos en el Consejo de la Magistratura, siete en la Auditoría porteña y el directorio del Banco Ciudad. Mientras algunos señalan que esos lugares deben ser repartidos con proporcionalidad a los bloques, otros dicen que todo está abierto a la interpretación.
La idea de la negociación es conseguir los votos para las leyes o, en su defecto, que los opositores se abstengan y no las traben. Con ese mecanismo, ya pasó el nuevo endeudamiento de la Ciudad y la ampliación de presupuesto, que incluía importantes redeterminaciones de precios en los contratos de recolección de basura. En ambos casos, sectores de la oposición señalaron que hubo ayuda por acción u omisión de la Coalición Cívica y el kirchnerismo, los dos principales candidatos a recibir los beneficios de la negociación abierta.
En la Auditoría porteña, hay siete cargos de auditores. El PRO se quedaría con tres: irían Santiago de Estrada, Alejandro Fernández y Juan Carlos Toso. Este último podría tener un impedimento legal –porque empezó en medio de un mandato–, en cuyo caso lo reemplazaría Clodomiro Risau. El resto está en debate. El kirchnerismo quiere tres lugares, en función del bloque de 15 legisladores que tendría a partir del 10 de diciembre. Otros sectores, entre los que están tanto el PRO como Proyecto Sur, opinan que les corresponden dos. No más.
Como candidatos a ocupar uno de esos cargos están el actual legislador de Nuevo Encuentro Gonzalo Ruanova y dos jóvenes de La Cámpora, Luana Volcovich y Cecilia Segura. En la Legislatura, algunos señalan que ellas dos serán las elegidas y que Ruanova se quedará afuera. Esto rompería el acuerdo interno que hay con el sabbatellismo. Otros candidatos son Adriano Jaichenko (UPCN), quien ya integra la Auditoría o bien Martín Olmos (por Amado Boudou), que es el hijo de Kelly Olmos. Sean dos o tres, el kirchnerismo se quedaría con la presidencia de la Auditoría. Sandra Bergenfeld deberá abandonar ese lugar: en el kirchnerismo la consideran “albertista” y cercana al ex K Diego Kravetz.
Proyecto Sur exige que le den un lugar y amenaza con judicializar la decisión si no se respeta la proporcionalidad. El cargo será para el legislador del MST Marcelo Parrilli. Podrá entrar si el kirchnerismo tiene solo dos auditores o bien si dejan afuera a la actual auditora de la CC, Paula Oliveto. Oliveto va por la renovación de su cargo, en un escenario complejo para los lilitos. “Estamos en una instancia de caída libre de la CC, donde necesitamos mantener cargos”, indicaron en el espacio de Elisa Carrió. En Proyecto Sur, no se mostraron muy felices con que siga en su cargo: “El PRO está más interesado en que siga Oliveto, porque es una auditora más de ellos”, lanzó el legislador Rafael Gentili. “Así ha funcionado con Santiago de Estrada en los últimos cuatro años, en los que ha garantizado que la auditoría no cumpliera con su rol”, remarcó.
Los cargos del Consejo de la Magistratura porteño requieren 40 votos. El año pasado, la discusión del Presupuesto se entreveró por esos cargos y finalmente quedó para marzo de este año. En ese momento, los legisladores de la CC aseguraron que no pensaban participar de ningún toma y daca. Hoy están negociando un lugar para Diana Maffía en el Consejo, aunque los macristas la resisten porque ella no tiene un perfil de votar las leyes que quieren. El kirchnerismo volvió a la carga con el titular del PJ, Juan Manuel Olmos, quien tendrá un suplente de La Cámpora, Mauro Riano.
El PRO tendría asegurado un lugar, que será para Sebastián De Stéfano, que responde al operador radical PRO Daniel “El Tano” Angelici, candidato a presidir Boca Juniors. Pero el macrismo va por más: quiere dos lugares.
La semana pasada se agitó el clima de una reunión conjunta de la Comisión de Justicia y la Junta de Etica cuando se alargaron los plazos para presentar candidatos y el presidente del bloque PRO, Cristian Ritondo, presentó otros dos: Laura Grindetti, hija del actual ministro de Hacienda, a la que también impulsa el Tano Angelici, y Agustina Olivero Majdalani, hija de la diputada macrista Silvia “La Turca” Majdalani. Dicen que la primera cuenta con más chances. El que se quedó sin posibilidad de recalar en el Consejo es el macrista Martín Borrelli, quien deberá dejar su banca en diciembre con destino incierto.
Proyecto Sur, por su parte, insistirá con la candidatura del jurista Beinusz Schmukler y el ibarrismo con Laura Morresi. Ninguno parece contar con posibilidades.
La propuesta de directivos del Banco Ciudad la hace el Ejecutivo porteño y la vota luego la Legislatura. Quien ya tendría asegurado un lugar en esa propuesta es Raúl “El Colorado” Fernández, que integra un bloque junto con Kravetz. Hay una discusión entre Proyecto Sur y el kirchnerismo por el otro lugar. Si ganan los K, irá al banco el ibarrista Eduardo Epszteyn.
En la Legislatura, se comenta que parte de la negociación está empantanada por una interna del PRO por quién será el vicepresidente primero, el virtual conductor por debajo de la vicejefa María Eugenia Vidal. Ritondo se encamina a ocupar ese lugar, aunque es resistido por diversos sectores del PRO. Según señalaban, Angelici buscaría que continúe en el cargo su amigo Oscar Moscariello, algo que Ritondo niega enfáticamente: “No hay una pelea con El Tano. Yo lo estoy ayudando a que sea presidente de Boca”, sostiene el peronista de Mataderos ante quien quiera escucharlo. Si los K logran formar un bloque de 15 legisladores (sumando al PJ, Nuevo Encuentro, el ibarrismo y el kirchnerismo puro y duro), se quedarán con la vicepresidencia segunda. Si no, quedará para Proyecto Sur, salvo que ese bloque se quiebre. Hagan sus apuestas.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux