El peronismo opositor busca reconfigurarse como bloque en la Cámara de Diputados de cara a la conformación que se dará a partir del próximo 10 de diciembre. Tras la renuncia de varios de sus integrantes, diputados y dirigentes del raleado Peronismo Federal (PF) se reunirán mañana para acelerar un acuerdo antes de la formalización de bloques y jefes de bancada. Intentan cerrar filas y conseguir escalar posiciones en las comisiones para retener una porción de los espacios que mantuvieron los dos últimos años.

“Estamos en medio de las conversaciones para resolver cuál es la tercera fuerza política en el Congreso: el radicalismo está consolidado en el segundo lugar pero nosotros tenemos que unirnos para no quedar relegados”, aseguró ayer uno de los diputados que encabezan el reordenamiento. Lanzados a la búsqueda de retener algo del poder político que habían logrado en las elecciones del 2009, su objetivo es no quedar detrás del Frente Amplio Progresista encabezado por el gobernador de Santa Fe, Hermes Binner, que sumó algunas bancas el 23 de octubre pasado y, si unifica a los legisladores que ya tenía, quedaría como tercera fuerza en el recinto.

El PF se consolidó al calor de la discusión por las retenciones móviles en el 2008. Allí el ex gobernador de la provincia de Buenos Aires Felipe Solá quedó al frente del bloque que estaba conformado por el duhaldismo, los diputados santafesinos que reportan a los ex gobernadores Carlos Reutemann y Jorge Obeid, Francisco de Narváez y representantes del interior del país. Entre todos sumaban 28, pero la renuncia de Solá en septiembre de este año hizo estallar la debacle interna del espacio político y el quiebre se profundizó con el aluvión de votos que logró la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Entonces fue cuando los legisladores santafesinos decidieron alejarse del PF para lanzar un espacio propio.

“Seríamos los mismos que en 2009 estuvimos en el Peronismo Federal, menos los tres que responden a Felipe Solá, pero todavía no se puede decir nada, porque están todos muy sensibles y una palabra malinterpretada puede provocar que se rompan los acuerdos”, dijo otro de los operadores políticos que impulsan el acuerdo. El renovado bloque estaría integrado por los representantes del gobernador puntano, Alberto Rodríguez Saá, que aportará nueve –contando a Ramona Puchetta, integrante del Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados que encabeza el piquetero Raúl Castells– y será mayoritario dentro del grupo, cuatro que quedarán del duhaldismo residual, cuatro del denarvaísmo –fue aliado de Saá en Buenos Aires en octubre–, Enrique Thomas y Ramón Puerta.

Con la salida de Solá –en vías de anunciar el bloque Unidad Peronista–, el mendocino Thomas es el que suena con mayor fuerza para ser erigido como el jefe del bloque –fue vicepresidente desde 2009– y es uno de los principales impulsores de una bancada que mantenga la identidad del PF. “No queda mucho tiempo, pero estamos tranquilos que muchos que parecían que se iban, se están arrimando”, señaló un diputado, esperanzado en que cambien de idea los seis santafesinos que anunciaron la creación de un espacio propio apenas finalizadas las elecciones. Uno de los seguidores del ex gobernador Reutemann, hoy senador, habría participado de las reuniones previas y los entusiastas ya suman a todo ese espacio como propio.