EL PAíS
› EN MEDIO DE LA DISCUSION TACTICA SE FUE GULLO
Otro portazo en la interna del ARI
› Por Felipe Yapur
La puesta en discusión del cronograma electoral de la Ciudad de Buenos Aires fue la mejor noticia para el ARI porteño, o mejor dicho, para Elisa Carrió. Enterada de la decisión judicial, la candidata presidencial ordenó enfriar las negociaciones que se realizaban con Aníbal Ibarra. El argumento esgrimido por los representantes de la chaqueña es que “hay que concentrar las energías en las elecciones del 27 de abril”. Sin embargo, las disputas por el armado de las listas de candidatos a diputados ya generaron sus primeras víctimas. Ayer, Juan Carlos Dante Gullo pegó el portazo.
Hacia el interior del ARI porteño hay sensaciones encontradas respecto de la conveniencia o no de cerrar un acuerdo con el actual Jefe de Gobierno. Algunos creen en que es una necesidad ante la buena performance de Mauricio Macri en las encuestas. En cierta medida, Carrió coincide con esta lectura. Por caso, el domingo pasado lo dijo ante este diario: “Antes que un empresario prefiero un jefe de gobierno”.
El pensamiento de Carrió choca con el de algunos de sus principales colaboradores que ponen más de un reparo a un posible apoyo a la candidatura de Ibarra. “Aníbal no se define sobre las elecciones de abril. Coquetea con nosotros y con (Néstor) Kirchner y al menos con nosotros, así no se hacen las cosas”, confió a este diario uno de los responsables del armado porteño del ARI. De todas formas, la resolución del dilema quedó postergada hasta nuevo aviso luego de la resolución judicial. Por ahora, y para garantizar que la nueva fecha de elecciones se fije más allá de junio, los legisladores del ARI están evaluando la posibilidad de votar el proyecto que impulsa la oposición y que determina octubre como el mes para elegir nuevo jefe de gobierno.
El cumplimiento del cronograma le deparó más de un disgusto a Carrió. El hecho de que el martes cerró el plazo para inscribir frentes electorales generó ya su primera víctima. Sucedió que los representantes del ARI no llegaron a un acuerdo con Dante Gullo del Partido Popular Nuevo Milenio. El histórico dirigente de la Juventud Peronista entendía que el armado de un frente debía contar con la participación proporcional de apoderados “pero nos dijeron que Lilita exigió uno solo y que debía ser del ARI”, indicó Gullo, quien ante la imposibilidad de cerrar un acuerdo pegó un portazo asegurando que “hay un manejo autoritario y en nombre del progresismo se utilizan prácticas que están reñidas con la democracia y la transparencia”.