Desde Lima

El presidente de Perú, Ollanta Humala, viajará a la Argentina entre abril y mayo de este año para reunirse con Cristina Fernández de Kirchner. Humala no pudo estar en diciembre en la toma de mando de la Presidenta por las protestas sociales en el Perú, que lo obligaron a suspender su viaje a último momento. Ambos presidentes se encontraron en Buenos Aires en junio de 2011, cuando Humala hizo una gira por los países de la región después de su elección y antes de asumir el poder. En ese encuentro, el peruano expresó su interés de un mayor acercamiento al Mercosur.

Para preparar la cita entre ambos presidentes, el canciller peruano Rafael Roncagliolo visitará Buenos Aires. En los últimos días se avanzaron en Lima los primeros pasos para este encuentro presidencial durante la visita a Lima del secretario de Relaciones Exteriores de Argentina, Eduardo Zuain, quien se reunió con el vicecanciller peruano, José Antonio Meier. La reunión de los funcionarios incluyó un abierto apoyo a la Argentina en su reclamo al Reino Unido por la soberanía de las Islas Malvinas.

Según información a la que accedió Página/12, la agenda de la cita entre los presidentes de Perú y la Argentina tendrá como uno de los puntos centrales las políticas de inclusión social. Humala ha puesto como una cuestión clave de su gestión el desarrollo de políticas de inclusión social y estaría muy interesado en conocer la experiencia del gobierno argentino en este aspecto y entablar acuerdos de cooperación sobre el tema. La integración regional, a la que Humala ha decidido darle especial atención con una apuesta por fortalecer Unasur y acercarse al Mercosur, será otro tema central a tratarse en el encuentro de los mandatarios. En esa reunión se firmarían diversos acuerdos para profundizar la cooperación entre ambos países.

La relación entre Perú y la Argentina ha sido históricamente cercana, pero ingresó a una etapa de enfriamiento luego de la venta de armamento que el gobierno de Carlos Menem hiciera a Ecuador en pleno conflicto armado de este país con Perú, en 1995. La relación comenzó a retomar su nivel histórico después de que, durante su viaje a Lima en marzo de 2010, cuando gobernaba Alan García, la presidenta Cristina Kirchner ofreció un “desagravio” público al Perú por aquella venta de armas. La visita de Humala a Buenos Aires busca avanzar en el fortalecimiento de esta relación.

Durante la reunión de Zuain y Meier en Lima, ambos compartieron un desayuno en la Cancillería peruana con los miembros del Grupo Peruano de Respaldo y Solidaridad a la Soberanía Argentina en las Islas Malvinas. Este grupo, que se formó en diciembre de 2011, está integrado por los ex cancilleres Manuel Rodríguez Cuadros y Diego García Sayán, actual presidente la Corte Interamericana de Derechos Humanos; Alberto Adrianzén, vicepresidente del Parlamento Andino; el congresista Víctor Andrés García Belaúnde, de la bancada Alianza Parlamentaria, aliada del oficialismo; y Marcial Rubio, rector de la Universidad Católica de Lima.

El desayuno culminó con un comunicado en el que se expresó el apoyo a la soberanía argentina sobre Malvinas y se exigió al Reino Unido cumplir las resoluciones de las Naciones Unidas que determinan la apertura de negociaciones diplomáticas acerca del reclamo argentino sobre las islas. También se respaldaron las decisiones adoptadas por el Mercosur sobre las Malvinas, como el bloqueo en los puertos de la región a los buques con la bandera de las islas, se instó al Consejo Andino de Ministros de Relaciones Exteriores a sumarse a este apoyo a las decisiones del Mercosur y se recordó el “apoyo histórico” de los países andinos a la soberanía de la Argentina sobre Malvinas. El comunicado también rechazó el anunciado envío a las islas del buque de guerra inglés HMS Dauntless.

El respaldo expresado por el Perú a la Argentina en su disputa con el Reino Unido por la soberanía de las Islas Malvinas sería ratificado personalmente por Humala a la presidenta Cristina Kirchner cuando ambos se reúnan en Buenos Aires. Durante la guerra de Malvinas en 1982, el Perú apoyó abiertamente a la Argentina y llegó a enviar aviones de combate para respaldar la causa argentina.