El Partido Justicialista nacional manifestó su respaldo a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y consideró el paro convocado por Hugo Moyano para el próximo miércoles de “injusto y desproporcionado para un gobierno que promovió la generación de puestos de trabajo” y llamó a la “reflexión” al sindicato de Camioneros. Así, el PJ tomó partido y salió a mostrar con quién se encolumnaba el peronismo tras los cuestionamientos que Moyano lanzó contra el Gobierno. “Frente a este escenario entendemos que esta comisión tiene un rol de respaldar a la presidenta de la Nación”, sentenció el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, en una rueda de prensa que compartió con el jefe del bloque de diputados del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, en la sede partidaria porteña. Ambos criticaron los bloqueos de los camioneros a las refinerías y la paralización del transporte de combustibles, aunque el duro documento que redactaron ayer los 21 miembros de la Comisión de Acción Política del justicialismo –antes que Moyano levantara el paro– finalmente no fue difundido.

“La medida nunca debió tomarse”, sostuvo Capitanich para referirse al paro convocado por Moyano para el miércoles que viene con una movilización a Plaza de Mayo. Agregó que “los más perjudicados son los camioneros” y recordó que “el Estado, y este gobierno, fue el principal aliado del gremio en virtud de generarles más oportunidades”. El chaqueño tampoco dudó en criticar las medidas que utilizó Moyano: “Primero tuvo como acción directa impedir la provisión a cajeros automáticos previo al Día del Padre, una fecha muy especial para los argentinos. En segundo lugar, el desabastecimiento de combustible, generando un problema estructural desde el punto de vista del sistema económico”, denunció.

“Ninguna medida sectorial tiene que afectar al conjunto de los argentinos”, sumó Rossi. “Los trabajadores han sido el sujeto de nuestra política, y el trabajo, el objeto”, señaló el diputado, quien remarcó que “desde ese punto de vista” la medida convocada por Moyano para el miércoles próximo le parece “injusta, incorrecta y sin legitimación”.

De todas maneras, la CAP del PJ prefirió archivar, al menos por ahora, el documento que había elaborado. Rossi explicó que el texto era de respaldo a la Presidenta, llamaban a la “reflexión al gremio de Camioneros para cesar las medidas de fuerza”, pero que ante el levantamiento de la medida decidieron no difundir la carta. No son pocos los miembros de la conducción del PJ nacional que consideran que Moyano no sólo se juega la conducción de la CGT, sino que su enfrentamiento con el Gobierno también tiene como objetivo posicionarse en la interna peronista como un referente de quienes quieren imprimirle un rumbo diferente del que le imprimió el kirchnerismo. Con todo, decidieron no echar más leña al fuego.

“Independientemente de las connotaciones políticas de la medida, lo que entendemos es que es perjudicial para el conjunto de los argentinos”, respondió Capitanich ante una consulta sobre las especulaciones por la relación de Moyano y Scioli, quien anticipó su aspiración presidencial para 2015. “Soy absolutamente respetuoso de todos los actores políticos, económicos y sociales, pero entiendo que ha sido una medida marcadamente desproporcionada”, concluyó el gobernador.

En cambio, otros mandatarios provinciales fueron más duros con el camionero. “Hugo Moyano es un extorsionador y el país se está dando cuenta de ello, tal cual lo dije hace más de un año”, afirmó el salteño Juan Manuel Urtubey. Para el entrerriano Sergio Urribarri el conflicto responde a “una salida anticipada” de Moyano de la CGT y que la intención del camionero es “hacer el mayor daño posible” al gobierno de Cristina. El tucumano José Alperovich, el mendocino Francisco Pérez y la catamarqueña Lucía Corpacci también se encolumnaron detrás de la Presidenta.