Un ex jefe de la seccional quinta de la policía provincial de Jujuy admitió ayer que durante la última dictadura funcionó en la provincia un grupo de oficiales y personal subalterno que se encargaba de “marcar” ciudadanos y viviendas de presuntos subversivos. Joaquín Sala, testigo por la defensa del militar retirado Mariano Braga, imputado en el juicio por el secuestro de Julio Alvarez García, ocurrido en 1976, señaló que le habían hablado sobre la existencia de un operativo que se realizó en la casa de la familia de Alvarez García, pero cuando se lo dijo a su jefe superior, el comisario Antonio Silvera, éste le manifestó que “no se meta” y que si se trataba de un secuestro era “el Ejército”.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux