Tras calificar de “hechos que tienen que ver más con delitos comunes que con lo que ocurrió en la crisis de 2001” a los saqueos que sacudieron a comercios de varios municipios del conurbano y varias otras provincias del país, el diputado bonaerense por el Frente para la Victoria y referente del Movimiento Evita, Fernando “Chino” Navarro, recalculó la dirección sobre quién cargar las responsabilidades por los hechos sucedidos pocos días antes de Navidad y atribuyó la organización de los saqueos a los comercios a la CGT liderada por Hugo Moyano y a la facción de la CTA dirigida por Pablo Micheli “con la participación de sectores residuales del duhaldismo y del PJ disidente”. “Los sectores opositores a gobiernos populares, porque esto pasó con Yrigoyen, con Perón, Alfonsín y a esta Presidenta, cuando no pueden confrontar en el marco de la democracia, recurren a la violencia”, consideró.

–¿Con qué elementos cuenta para señalar a los sectores sindicales opositores al gobierno nacional como los responsables de los saqueos?

–En las declaraciones de los últimos meses de distintos dirigentes ligados a los sectores que mencioné, se ve una escalada verbal que estimula la violencia y que se materializó en el último paro, cuando violentaron negocios y la voluntad de trabajadores de ir a trabajar. Las declaraciones que el mismo día de los saqueos realizó Moyano, justificando la violencia con una pobreza inmensa inexistente, para comparar lo sucedido con la crisis de 2001. Y la propia conferencia de prensa que él y Micheli dieron el día después del paro, cuando implícitamente reconocieron la injerencia en los hechos. Pero además, datos concretos: en Neuquén apareció con el 40 por ciento del cuerpo carbonizado un dirigente ligado a la CTA de Micheli, luego de cortar los cables de alta tensión en las afueras de la ciudad; personas ligadas a Camioneros en San Martín y Campana; la denuncia de un farmacéutico en Junín que fue golpeado por un camionero; comentarios de compañeros de nuestra organización que observaron cómo se desplazaba personas de distintos barrios en vehículos ligados a Camioneros.

–¿Descarta la participación en los saqueos de personas ajenas a estos sectores?

–Fueron hechos organizados políticamente por sectores sindicales ligados a la CGT Moyano y a la CTA Micheli que contaron con la participación de sectores residuales del duhaldismo y del PJ disidente. Si bien en algunos lugares, como en San Fernando, hubo alguna participación de sectores del barrio, sobre todo jóvenes, en el resto de la provincia el gran conjunto de la población no participó. Los vecinos no comparten la violencia, pero además la situación argentina socioeconómica difiere mucho de los saqueos anteriores, como por ejemplo en 2001. Somos conscientes, sobre todo los vecinos, de que aún falta mucho por mejorar, pero también que consideran que ese mucho se va a resolver dentro de la democracia de un Gobierno que siempre en esta coyuntura ha resuelto en favor de los sectores populares y más humildes. Sería bueno que la Justicia investigue a los responsables intelectuales, quiénes estuvieron detrás.

–¿Cómo evalúa la situación de aquellos lugares, como en San Fernando, en donde sí hubo participación de la población?

–Los hechos de violencia no prosperaron, fracasaron. Salvo la situación de San Fernando, en la que participaron un grupo de chicos calificados como aquellos que no trabajan ni estudian, en el resto de los municipios no prosperó. En Campana fueron diez micros con personas de otros distritos para provocar un hecho en el que la población de Campana no participó. La pobreza existe, por supuesto. La situación de los sectores más humildes del conurbano, como Fiorito o Villa Albertina, ha mejorado mucho. Pero también faltan muchas cosas. Nosotros entendemos las necesidades y trabajamos todos los días por resolverlas.