Tras su paso por el Senado, el memorándum entre Argentina e Irán para avanzar en la resolución de la causa que investiga el atentado a la sede de la AMIA será tratado la semana entrante por la Cámara de Diputados, que podría darle sanción este mismo miércoles. El oficialismo cuenta con el número de legisladores suficiente para conseguir quórum y aprobar el texto, aseguró el jefe de la bancada del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, en diálogo con Página/12, y el objetivo es saldar este tema antes del comienzo del período legislativo ordinario, el próximo viernes 1º de marzo. El primer paso se dará el martes en el plenario de las comisiones de Relaciones Exteriores, Justicia y Asuntos Constitucionales, adonde asistirá el canciller Héctor Timerman para responder las dudas de los legisladores. De todas formas, los principales bloques de la oposición ya anticiparon que no facilitarán el tratamiento del acuerdo ni votarán a favor de su aprobación.

El trámite comenzará el martes, con la visita del ministro de Relaciones Exteriores al plenario de comisiones. “Esperamos un trámite razonable, en el que el tema se aborde como corresponde, ya que se trata de un tema muy sensible, pero también de una política de Estado”, aseguró Rossi, en referencia al accidentado paso de Timerman por la Cámara alta la semana pasada. “Cuanto más responsable sea el debate, más respeto habrá por las víctimas”, le dijo el rosarino a este diario. El Frente para la Victoria no tendría mayores problemas para lograr las firmas necesarias que permitan que el dictamen se trate apenas veinticuatro horas más tarde en el recinto.

Una vez allí, los márgenes se vuelven más finos. El titular de la principal bancada opositora, el radical Ricardo Gil Lavedra, anticipó que la postura de su bloque será “adversa al memorándum” de entendimiento con Irán. “Queremos pedir al canciller Timerman que aclare los puntos oscuros del acuerdo”, manifestó el diputado, quien de todas formas aseguró que la decisión de no facilitar el tratamiento y oponerse en la votación ya está tomada. Aunque aún no es oficial, este diario pudo averiguar que los bloques del PRO, el justicialismo disidente y el monobloque de Patricia Bullrich tampoco facilitarán el tratamiento.

Resta ver la posición del FAP, de los legisladores que responden a Proyecto Sur, de aquellos referenciados en Felipe Solá y de los diputados del Frente para la Victoria alineados con la CGT moyanista, Facundo Moyano y Omar Plaini. “Definiremos la postura de forma orgánica en la central entre el lunes y el martes”, aseguró el dirigente canillita. Por ahora, los dos diputados de extracción sindical estarían más cerca del sí que del no, aunque en el kirchnerismo no cuentan con esos votos, ni con el del cada vez más crítico Jorge Yoma, a la hora de hacer el poroteo.

Con la tranquilidad de tener los votos suficientes, en el oficialismo el objetivo ahora es bajar los decibeles respecto de lo que fue el turbulento tratamiento del proyecto en la Cámara de Senadores, que incluyó fuertes cruces entre el canciller y algunos legisladores radicales, para que el memorando se apruebe “en otro clima, más acorde al tema que está en juego”, según confió un importante miembro de la bancada kirchnerista.

“Esperamos tener un debate más constructivo”, se sinceró ayer el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara, Guillermo Carmona. “Nosotros vamos a buscar que la reunión se desarrolle ordenadamente”, señaló el diputado informante del proyecto, quien manifestó su anhelo de que “la oposición pueda evacuar sus dudas en un marco de respeto”.

Por su parte, Carlos Raimundi, del bloque aliado Nuevo Encuentro, anticipó el respaldo al acuerdo por parte de todos los miembros de ese espacio, por entender que se trata de “una oportunidad que no se puede dejar pasar” para resolver finalmente el atentado 19 años más tarde de que se llevara a cabo. “La Presidenta ha sido muy cuidadosa y muy inteligente al separar el plano de la causa del de la geopolítica”, señaló Raimundi, que también custionó a la oposición por rechazar el acuerdo con “pocos argumentos y de baja calidad.”

El memorando firmado por los gobiernos argentino e iraní a fines de enero es el primer paso adelante de la causa desde que en 2006 la Argentina reclamara la extradición de ocho ciudadanos iraníes imputados de haber participado del planeamiento del ataque terrorista. Entre los sospechosos figuran el actual ministro de Defensa de Irán, Ahmad Vahidi; el ex presidente Alí Rafjansani y el ex canciller Alí Akbar Velayati, todos ellos con orden de captura de Interpol.

El acuerdo establece que el juez y el fiscal argentinos de la causa, Rodolfo Canicoba Corral y Alberto Nisman, puedan viajar a Teherán a interrogar a seis de los sospechosos, además de la conformación de una “comisión de la verdad”, integrada por juristas de terceros países, que podrá colaborar con la investigación emitiendo recomendaciones a ambos gobiernos. Para que pueda avanzarse en este sentido, el tratado deberá ser ratificado también por el parlamento iraní.